El sector frutícola reconoce que gran parte de su crisis se debe a la nula inversión en promoción

Los representantes del sector frutícola aragonés coinciden en que la crisis que soporta esta producción tiene un claro componente estructural. Incluso están de acuerdo en que una gran parte de las dificultades comerciales que soportan desde que Rusia cerró hace ya cuatro campañas sus fronteras a esta producción tiene mucho que ver con una escasa concentración de la oferta y una nula inversión en promoción.

Así se evidenció este lunes tras la reunión que UAGA, Asaja, Araga, UPA, Cooperativas Agroalimentarias y organizaciones de productores, mantuvieron este lunes con el consejero de Desarrollo Rural, Joaquín Olona, para diseñar un plan de acción consensuado, que el consejero espera disponer antes de que finalice el año, con el que hacer frente a la grave situación que atraviesa el sector por la crisis de precios. Queda, sin embargo, mucho camino por recorrer para llegar a un acuerdo porque aunque hay aspectos en los que los distintos agentes están de acuerdo, no todos comparten las soluciones.

«Nos enfrentamos a un déficit de estructura comercial, de capacidad de organización de la oferta», ha señalado Olona. Pero el consejero recordó que el sector tiene herramientas para hacer frente a esta carencia. Son los fondos operativos –que cuentan con financiación europea– y cuyo presupuesto –unos 12 o 13 millones de euros anuales– no se ha utilizado para la promoción. «Quizá somos tributarios de nuestros errores por la apuesta excesiva al destinar estos fondos a aumentar la producción sin desarrollar en paralelo acciones comerciales imprescindibles», destacó.

Tanto el representante de Cooperativas Agroalimentarias, Javier Basols, como el de Asaja, Ramón Pórtoles, y el de UAGA, Manuel Rausa, han reconocido que es necesario volver a utilizar estos fondos para recuperar e incrementar, especialmente en España, el consumo de fruta dulce. Y si bien han coincidido en que la grave crisis que soporta el sector exige una mayor capacidad de organización y asociación entre los productores, reivindicaron también medidas a corto plazo, entre ellas, un arranque de producciones que reduzca el elevado volumen de producción actual.

«Tenemos que agruparnos más y organizarnos mejor», ha defendido Basols. Pórtoles destacó la necesidad de una unión que permita afrontar el reto comercial, mientras que Rausa ha insistido en que existe un documento, apoyado por el sector, el que se establecen alternativas, entre ellas y sobre todo, que Europa reconozca «que hay una perturbación de mercado», figura recogida en la PAC que permitiría dar ayudas a los agricultores afectados.