El PP reprocha al PSOE que rebaja Sucesiones en todas las CCAA, salvo en Aragón

El diputado autonómico del PP Antonio Suárez ha reprochado este jueves al consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, que el PSOE esté rebajando el impuesto de Sucesiones en todas las autonomías en las que gobierna, salvo en Aragón. No ha sido la única crítica que se ha oído en el pleno de las Cortes de Aragón, ya que la parlamentaria aragonesista Elena Allué ha denunciado el problema de competitividad que, a su juicio, tiene la Comunidad tras la subida fiscal pactada por la izquierda. Y ha puesto de ejemplo que solo 15 de las más de 700 empresas que han salido de Cataluña se hayan interesado por instalarse en Aragón.

Ambos partidos, junto a Ciudadanos, han vuelto a cargar contra el incremento impositivo que aprobó el gobierno PSOE-CHA nada más llegar al Pignatelli con sus socios de investidura, lo que ha convertido a Aragón en la única autonomía que ha subido la recaudación en todos los tributos cedidos. “Este dato es revelador, como el hecho de que en 2016 se registrara una fuga de empresas”, ha destacado Suárez antes de subrayar que las autonomías gobernadas por el PSOE, caso de Asturias y Andalucía, ya ha rebajado Sucesiones, mientras la de Extremadura lo está estudiando aplicar en 2018.

En una comparecencia solicitada por el PP para informar sobre la posible modificación del impuesto, Gimeno ha reiterado que los expertos no solo defienden su mantenimiento, sino que han recomendado al Gobierno central que fije un suelo “para que no haya competencia a la baja”.

El consejero de Hacienda ha reconocido que la recaudación de este año rondará los 190 millones de euros, 50 más de los presupuestados, aunque ha subrayado que será similar a la obtenida por el PP en 2014, antes de aplicar una bonificación “en año electoral”. Y ha defendido que si se aplicó una subida fiscal fue para paliar los recortes sociales aplicados por el Gobierno de Rudi durante la pasada legislatura.

El debate parlamentario no ha aportado prácticamente argumentos nuevos. Suárez ha insistido en que Aragón está a la cabeza en recaudación por herencias, con una subida del 10% frente al 2,1% de la media nacional. “Es hora de aliviar a los aragoneses tras la crisis más dura de la democracia, los tremendos recortes laborales y una notable subida fiscal”, ha defendido.

La aragonesista Elena Allué ha señalado que “todos los sectores” están pidiendo la revisión de la carga fiscal y ha lamentado el problema de competitividad, ya que todas las autonomías del entorno tienen menor presión impositiva. El mismo discurso de que Sucesiones es un impuesto “obsoleto” lo ha mantenido el diputado de Ciudadanos Javier Martínez, quien han vuelto a condicionar su voto al techo de gasto a la revisión de los impuestos de Sucesiones y de Contaminación de las Aguas.

Los grupos de la izquierda han intervenido igualmente como un bloque. El diputado de Podemos Héctor Vicente ha criticado la “competencia desleal” que hacen comunidades como Madrid, gobernada por el PP, al bonificar dicho impuesto, mientras el mismo partido se queja de que Aragón esté mal financiado. “Los expertos dicen que Sucesiones es fundamental en España. El problema es la gestión autonómica del impuesto”, ha sostenido.

El nacionalista Gregorio Briz ha expuesto que el verdadero debate reside en la financiación autonómica, por lo que esta polémica se atajaría de raíz, como también ha apuntado Gimeno, si el Gobierno central eliminara este impuesto estatal y compensara económicamente a las autonomías. Además de sumarse a las críticas al PP de Madrid por hacer “dumping” con la carga fiscal, ha acusado a la derecha de defender “derechos de clase”. Por su parte, el socialista Alfredo Sancho he reforzado el argumento de que el impuesto es estatal y que si el Gobierno aragonés decidió actuar sobre los impuestos decididos fue para recuperar derechos sociales tras los recortes del PP.