Podemos pincha en sus primarias al votar solo uno de cada diez inscritos en Aragón

Más de 5.000 militantes eligieron hace dos años a Echenique, pero en su sucesión lo han hecho 1.610. El partido asume la desmovilización y estudiará cómo darle la vuelta tras cosechar la más baja participación en una consulta.

Echenique, con los candidatos con más opciones a relevarle, Nacho Escartín y Erika Sanz, en las Cortes.
Echenique, con los candidatos con más opciones a relevarle, Nacho Escartín y Erika Sanz, en las Cortes.
J. M. M.

Podemos-Aragón ha sufrido un verdadero pinchazo en las primarias abiertas a mediados de septiembre para elegir al sucesor de Pablo Echenique al frente de la secretaría regional. Como temían sus propios dirigentes, solo uno de cada diez inscritos en el partido han participado en la votación, que se cerró ayer al mediodía y cuyos resultados se conocerán mañana.

Únicamente 1.610 de las 15.132 personas que forman las bases de Podemos-Aragón eligieron a alguno de los tres candidatos que optan a liderar la formación, los diputados Nacho Escartín y Erika Sanz y el militante Alfredo Casal. Y tampoco fueron mucho mejores los resultados cosechados en la otra elección, la del sucesor de Maru Díaz al frente de la secretaría de Zaragoza: votaron 1.214 de los 9.483 inscritos, lo que representa menos de un 13%.

Fuentes del partido consideraron que la desmovilización favorecerá a la candidatura de Nacho Escartín, que lleva meses trabajándose el territorio con el respaldo de una amplia base de cargos institucionales con "tirón".

El batacazo aún es mayor si se tiene en cuenta que en las anteriores primarias, las de 2015, hasta 5.467 militantes se implicaron en una elección que ganó Pablo Echenique frente a la actual presidenta de las Cortes, Violeta Barba. Es decir, más de triple de personas que lo han hecho ahora para designar a su sucesor.

De hecho, la formación morada ha tocado suelo en lo que se refiere a participación. Con tan solo repasar los datos de las cinco consultas realizadas hasta el momento se aprecia la caída hasta llegar a mínimos: si en la elección de Echenique votaron 5.467 inscritos, unos meses después lo hicieron la mitad, 2.237, para decidir el respaldo a la investidura de Lambán como presidente de Aragón y otros 2.498 cuando se aprobó el documento político a finales de 2016. Y hubo menos interés para avalar las cuentas autonómicas de este año, porque votaron menos inscritos, concretamente 2.018. Por tanto, ahora se ha batido con creces el peor registro.

El secretario Político, Lorién Jiménez, admitió la desmovilización de las bases del partido, lo que achacó a la conjunción de varios factores. Por una parte, al hecho de que se haya estrenado en Aragón las nuevas normas de participación aprobadas en la asamblea de Vistalegre, que obligan a los inscritos a registrarse con el DNI para poder votar. Esta "barrera" garantizó una mayor seguridad en el proceso, pero una desincentivación a participar. Hasta el punto de que el partido decidió que los inscritos pudieran validar su identificación hasta el final del plazo de votación, aunque solo llegaron a hacerlo un 16%.

Lorién Jiménez también consideró que la campaña "fraternal" de las candidaturas tampoco ha ayudado a movilizar a las bases, ya que se ha podido dar la sensación de que las diferencias programáticas y de modelo de partido eran mínimas. "Se ha rehuido el conflicto interno y como las líneas políticas seguidas hasta ahora tampoco se han cuestionado, pues eso desmotiva", insistió.

Por ello, apuntó que la nueva dirección del partido deberá estudiar cómo darle la vuelta a la situación, revisar si la plataforma electrónica supone una barrera con la brecha digital y lograr "un punto de intensidad" a los proceso internos para motivar a las bases, "sin caer en los excesos de otros partidos".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión