Remolinos: como gardenias en lata

El impulsor del proyecto enLATAmus lleva además 34 años al frente del bar El Imperdible de Remolinos, y actúa por toda la Comunidad con el grupo Los 3 Norteamericanos.

David Giménez, dentro del contenedor que alberga el proyecto enLATAmus.
David Giménez, dentro del contenedor que alberga el proyecto enLATAmus.
Laura Uranga

Hay un detalle palmario que convierte a David Giménez en antagonista de James Bond. Al implacable 007, el martini le gusta agitado, no revuelto; a David Giménez le chirría mucho que le llamen agitador cultural, porque se suele emparentar esa categorización con la de profeta o visionario, y él hace lo que hace (muchas cosas, siempre en el ámbito sociocultural, dentro y fuera de su Remolinos) por una razón: pasarlo bien, lo mejor posible.

"Tengo aquí –dice David– un contenedor de barco, está pintado de rosa, y allí ocurren cosas gracias a un equipo de gente que trabaja para ello. No es la Capilla Sixtina, ni yo ando predicando nada: funciona bien como proyecto de la Ribera Alta, no solo de Remolinos. Hay tres alagonesas, uno de Utebo y otros tres de Remolinos. Las exposiciones de pintura e ilustración son el fuerte, pero también hay poesía, música… cualquier propuesta es válida para disfrutar. Si alguna vez alguien se pone tenso o intenso, lo tranquilizamos; a ver, que esto es lo que es, vienen treinta o cuarenta personas a las actividades. En la ciudad lo mitifican los que no lo han visto", rie.

Remolinos: como gardenias en lata

EnLATAmus (así se llama la idea) surge, eso sí, de una visión. El ‘flashazo’ llegó en Belem, cerca de Lisboa, tierra de ‘saudade’ y amores en pespunte. "Vi un bar llamado A Marguem, junto al Tajo; cayó una gran tormenta, y este lugar que parecía un simple contenedor resultó ser un sitio para oír jazz y comer ensalada muy mala. Ahí me dije que había que adaptar la idea a Remolinos, quitando lo de las ensaladas. Por si fuera poco, estuve en Gante y encontré otro sitio similar. Muchas señales. Al regresar cogí con la defensa baja a un empresario de la construcción amigo mío y le dije que me pusiera un contenedor en Remolinos para inventar algo. Costó 1.500 euros hace siete años. El alcalde de aquí, Alfredo, deja hacer; suele secundar las ideas que le cuento y no malmete con los detalles, lo que es muy de agradecer. Nos pusieron el cemento, nos dieron la luz y empezamos".

Cariño recíproco

Llamar excéntrico a David, por aquello del contraste con el entorno, sería tan académico como injusto. Lo que sí hace es aplicar humor al tajo cotidiano, algo muy cuerdo. "En el pueblo nos queremos todos mucho. Mi familia somos los machines, porque mi padre cantaba canciones de Antonio Machín. Más que máquinas, estamos como las maracas".

Desde hace casi dos años, David integra el proyecto musical Los 3 Norteamericanos con Roberto Artigas y Joaquín Carbonell. Hacen música de los 60 y los 70. "Bobby es de Casetas, Joaquín vive en La Joyosa, aunque es de Alloza: somos un grupo de la ‘haute riviere’ del Ebro . Empezamos en el Vinos Chueca de Bobby para que estrenara un contrabajo que se había comprado; yo no había cantado nunca, pero podía hacer el payaso… al principios solo hacíamos conciertos para organizaiones beneficas, visitas a cárceles, residencias de ancianos… luego ya empezamos a cobrar por tocar y a lo tonto, hemos hecho treinta fechas este verano. Lo pasamos muy bien tocando la música de la sinfonola de mi padre".

David es poeta, editor de libros cartoneros (Cartonerita Niña Bonita, siguiendo la estela de Eloísa Cartonera en el barrio de la Boca de Buenos Aires) y regenta el bar El Imperdible desde hace 34 años. Su techo está lleno de bandejas de todos los colores. "En casa hemos sido siempre hosteleros, tenemos otro bar ahí, la Maravilla, desde hace más d cincuenta años. Yo estudié, di clases, pero no me gustaba enseñar. Decidí poner un bar que fuera algo distinto; luego no puede ser tan distinto, porque estás en un pueblo. Hay exposiciones, conciertos… echamos muchas horas. Mi padre me dijo que no abriera otro bar, y no le hice caso. Era un consejo buenísimo; no sé qué hago yo aquí, cada día sirvo menos cervezas".

LOS IMPRESCINDIBLES

Las minas de sal

El origen de su explotación se remonta a la época romana. El grupo vasco Minersa es el actual referente de la actividad, tras adquirir el 100% de Ibérica de Sales; se produce sobre todo sal seca para nutrición animal y para el deshielo.

Roberto Coromina

El artista plástico de Remolinos ganó el año pasado el premio de Arte Santa Isabel de Portugal con su obra ‘Pintura #46’. Su rompedor trabajo va de la reinterpretación de obras clásicas al fractal y los juegos lumínicos.

El dance

En el pueblo hay documentación de 1854 que ya habla de esta tradición, mantenida a capa y espada desde entonces con la excepción de los años de contienda civil. Es un dance muy enérgico, rápido y alegre.

- Ir al especial 'Aragón, pueblo a pueblo'.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión