El nuevo escudo de España de la estación de Canfranc ya está instalado en el vestíbulo

El nuevo escudo de España que lucirá el vestíbulo de la estación de Canfranc ya está colocado, aunque todavía se encuentra tapado. Corresponde a la monarquía de Alfonso XIII, cuando se inauguró el paso internacional en 1928, y sustituye al que modificó la dictadura de Franco, entre 1938 y 1945, y que se descolgó el pasado 20 de julio. La empresa zaragozana De Grúas ganó el concurso y confeccionó el nuevo escudo en escayola durante dos meses. Sus operarios lo colocaron esta semana en la parte sur del vestíbulo.

Fuentes del Departamento de Vertebración Territorial, Vivienda y Movilidad señalaron que está previsto que la inauguración de este elemento sea el próximo 3 de octubre, aunque todavía no está cerrado definitivamente. De esta manera, el Gobierno aplicará la reciente Ley de Memoria Democrática de Aragón, aprobada en julio, que insta a retirar el de la dictadura franquista y recuperar el de la monarquía de Alfonso XIII, cuando se inauguró la estación y el paso en 1928.

Suelo y Vivienda licitó las obras del nuevo escudo, a las que se presentaron tres empresas, y se eligió a De Grúas de Zaragoza por un precio cercano a los 3.000 euros. Un escultor escogido por la firma utilizó una imagen del túnel del Somport para copiarlo porque no se ha podido encontrar una fotografía del escudo original que existía cuando se inauguró en 1928.

La colocación del nuevo escudo que se realizó en dos días (lunes y martes)? no resultó demasiado complicada. Más complejo fue descolgar el de la dictadura, que pesaba 250 kilos, y que llevó a creer que habría que fraccionarlo en varias partes, aunque al final no hizo falta y se sacó de una pieza.

Para disponer el nuevo escudo, primero se instaló la silueta, los cuatro cuarteles y las flores de lis sin necesidad de dividirlos, que era una posibilidad que se había previsto. Al día siguiente, se colocó el toisón de oro y los eslabones que adornan el cuerpo del escudo. Esta parte se conoce en términos heráldicos como la mesa de espera.

Los trabajadores de la misma empresa trasladaron en agosto a Canfranc el nuevo emblema , que aguardó en las propias dependencias de la estación el momento de su colocación. El hecho de que hubiera menos visitantes estos días facilitó los trabajos. Fue necesario el uso de un andamio para llegar al lugar más alto del vestíbulo.

El emblema de escayola que presidió la estación desde finales de la guerra civil hasta agosto de 2017 se descolgó, se embaló y fue depositado en el Archivo Municipal de Huesca porque tiene categoría de bien de interés cultural.

Lámparas y balaustradas

Por otra parte, la Escuela de Conservación y Restauración de Huesca concluyó este año los trabajos en el vestíbulo, aunque quedan varios detalles para que sea igual que cuando funcionó la línea internacional desde 1928 hasta 1970. "Ahora nos hemos llevado las lámparas para restaurarlas durante el año colaborando con un cristalero que pueda recrearlas", detalló el director de la Escuela de Conservación de Huesca, Ignacio Mustienes. "Además, dejamos varias piezas de escayola preparadas para que las coloquen los especialistas. Hemos restaurado 16 relieves escultóricos del dios Mercurio y seis de ellos los van a colocar ahora", añadió.

Además, Suelo y Vivienda señaló que faltaría recuperar las baldosas del suelo, las balaustradas de mármol que desaparecieron y las puertas del vestíbulo.