Los hasta cinco grados que hoy pueden bajar las temperaturas máximas en algunas zonas de Aragón, sobre todo en la provincia de Zaragoza, se van a agradecer. Después de dos días en los que salir a la calle en las horas centrales teniendo que soportar casi 40 grados ha sido un calvario, el calor da una tregua el fin de semana.

Los bilbilitanos pueden convertirse en los más beneficiados de este alivio térmico si nos fijamos en las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Calatayud alcanzó ayer los 38.5 grados a las 17.20 y hoy se espera que el termómetro no supere los 33. En la capital aragonesa el ambiente también será algo menos asfixiante. Si ayer en el Canal se midieron hasta 39,1 grados, hoy la máxima zaragozana se sitúa en los 35. Los jaqueses también van a estar más fresquitos y los 34,6 grados de ayer se quedan en 31. Un respiro que no va a llegar por igual a toda la comunidad. Los fragatinos volverán a tener que convivir con hasta 38 grados.

El refrán de que nunca llueve a gusto de todos también se puede aplicar al calor. Y es que hay sectores económicos que se benefician de jornadas sofocantes como las de los dos últimos días. La venta de ventiladores y aires acondicionados, aparatos de climatización que se vuelven imprescindibles en estos días, se han disparado casi un 50% por ciento con respecto a las mismas fechas que el año pasado. Los taxistas, cuenta Miguel Ángel Perdiguero, vicepresidente de la Asociación Provincial de Autotaxi de Zaragoza, también hacen un poco más de negocio "sobre todo entre las 15.00 y las 17.00, cuando es insoportable esperar o caminar bajo el sol".

La otra cara de este comienzo de verano tan sofocante son los golpes de calor. La sección sindical de la candidatura independiente de CSIF en Sarga (empresa pública que contrata a los brigadistas de las cuadrillas contra incendios) denunció ayer que hasta cinco trabajadores los han sufrido mientras se encontraban realizando labores silvícolas en los tajos asignados con temperaturas que, aseguran, han superado los 41 grados. También tienen constancia, afirman, de casos de quemaduras y de deshidratación.

Hoy es probable que llueva por la tarde en el Pirineo y la Ibérica, sin descartar que las tormentas sean fuertes en Teruel. El calor seguirá cediendo mañana gracias a la llegada de una borrasca de origen atlántico y continuará así el lunes, cuando se esperan chubascos en el Pirineo y la Ibérica.