La deuda de Aragón se disparará 326 millones a fin de año, más del doble de la previsión oficial

El plan de ajuste remitido por el consejero Gimeno al Ministerio de Hacienda aumenta la cifra hasta 7.813 millones. La primera modificación del presupuesto se aprueba hoy.

Fernando Gimeno.
Fernando Gimeno.
Aránzazu Navarro

El Gobierno de Aragón estima que la deuda autonómica se habrá incrementado en más de 326 millones de euros al cierre del ejercicio, lo que duplica con creces la previsión incluida en los presupuestos que aprobaron todos los partidos de izquierda hace menos de un mes. El plan de ajuste que acaba de remitir el consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, al Ministerio estima ahora un mayor nivel de endeudamiento cuando finalice el año, hasta alcanzar los 7.813 millones. Esto supone un incremento del 4,3% respecto a la cifra con la que se cerró 2016.

Ni siquiera la subida fiscal impulsada por la coalición de gobierno PSOE-CHA el año pasado ha permitido poner coto a la deuda viva de la Comunidad, que sigue desbocada. De hecho, el documento remitido a Madrid apunta que las arcas autonómicas requerirán de una inyección de 848,6 millones de euros del fondo de financiación habilitado para las comunidades autónomas con el objetivo de refinanciar créditos y atender pagos. Mientras, las amortizaciones planificadas a lo largo del ejercicio se limitan a 522,4, lo que provocará que la deuda viva aumente en los citados 326 millones a 31 de diciembre.

El plan de ajuste, basado en las cuentas prorrogadas al haberse confeccionado en plena tramitación de las definitivas, detalla que buena parte del endeudamiento, concretamente un 42,6%, corresponderá al fondo de financiación autonómica. A esos 3.336 millones se sumarán 2.304 en créditos a largo plazo y con el Banco Europeo de Inversiones y otros 2.106 en valores, además de 56 en préstamos a corto plazo.

El documento remitido al Ministerio de Hacienda deja bien claro que este año "no se ha previsto la necesidad de adoptar acuerdos de no disponibilidad" presupuestaria, de modo que los consejeros no tendrán cortapisas para gastar.

El propio Fernando Gimeno explicó la semana pasada que con la buena marcha de la recaudación en el primer cuatrimestre estaba convencido de poder cumplir con creces con las previsiones de ingresos. Y como las cuentas no se han aprobado hasta ahora, la capacidad de que se pueda gastar todo lo presupuestado es mínima, por lo que el consejero de Hacienda se mostró confiado de disponer del suficiente margen para cumplir el objetivo de déficit, fijado en el 0,6% para este año.

La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ya apuntó hace dos meses que el repunte de deuda que tuvo Aragón en 2016, del 8%, se mantendrá hasta 2020, aunque lo hará de una manera más suavizada. Solo hay otras dos autonomías –Extremadura y Murcia– en las que sucederá algo similar.

Los cálculos del Airef apuntan a que la deuda de Aragón aumentará en más de 400 millones en los próximos tres años, aunque solo en este ejercicio se igualará la cifra al incrementarse en 326 millones, tal y como ha reconocido la DGA. El año pasado lo hizo en 556.

Modificación de 1,2 millones

Por otra parte, el Gobierno de Aragón lleva hoy a las Cortes, solo 26 días después de su aprobación y 19 después de su entrada en vigor, la primera modificación de los presupuestos de este año. Se trata de 1,2 millones de euros para distintos gastos corrientes del Departamento de Presidencia que se detraen de otras partidas del mismo capítulo.

Además de dar el visto bueno a este cambio, la comisión de Hacienda también autorizará dos programas plurianuales de las consejerías de Sanidad y Vertebración del Territorio que suman más de 78 millones.

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