La concertada espera un masivo seguimiento de su manifestación el próximo 4 de abril en Zaragoza

Algunos colegios que podrían perder un aula de primero de infantil también anuncian acciones individuales como protesta.

Ante las semanas de incertidumbre que viven muchos colegios tras conocerse que el Gobierno de Aragón no renovará los conciertos en algunas aulas de 1º de infantil, el sector ha convocado una manifestación el próximo 4 de abril en Zaragoza, que espera que sea masiva. En ella se pedirá mantener la financiación pública de todas las unidades que tengan demanda, y reunirá a la patronal (Escuelas Católicas), los padres (Fecaparagón) y los sindicatos (FSIE, USO y CECE). Partirá de la plaza de Aragón y finalizará con la lectura de un manifiesto en el edificio Pignatelli, sede del Gobierno de Aragón. "Esperamos una buena respuesta, llevamos casi 30.000 firmas recogidas y tenemos que demostrar la preocupación y la indignación que, por desgracia, nos está uniendo –declaró ayer el presidente de Fecapa en Aragón, Miguel ángel García Vera–. Y esperamos que la Administración reaccione, que está a tiempo". García Vera insistió en que la pretensión de la concertada es defender sus derechos y las libertades "de todos".

A esta acción conjunta, se sumarán las que realizarán algunos colegios por su cuenta. Es el caso de La Anunciata, uno de los que ha parecido esta semana en una posible lista de afectados, y cuyos responsables sostuvieron la necesidad de mantener su concierto, teniendo en cuenta que tiene "un 49% de inmigración y más de un 80% de alumnos en riesgo de exclusión social". El centro realiza este domingo, a las 11.00, su gala ‘Collywood stars’, donde sus estudiantes presentarán los cortometrajes que han ido filmando durante el curso y que aprovecharán para reivindicarse como "un colegio integrador de aprendizaje-servicio". También el San Gabriel de Zuera está valorando organizar una acampada en sus instalaciones para demostrar la unión de toda su comunidad escolar.

Precisamente ayer, la diputada del PAR María Herrero pidió en rueda de prensa que Educación "no cierre ningún aula sin saber cuál es su demanda" y dejar que sean las peticiones de los padres las que regulen qué clases deben mantener o no el concierto.

Por otra parte, el colegio Escolapias Pompiliano pidió ayer a CGT que rectificara el informe que pedía el cierre de clases de la concertada en centros que no escolaricen a al menos un 1% de alumnos con necesidades especiales. Este centro considera que el documento está basado en "datos erróneos" y está "obsoleto". Por su parte, el sindicato respondió que su trabajo se ha basado en datos oficiales entregados (y firmados) por la consejera, Mayte Pérez, y que son públicos.

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