La UZ no implantará grados de tres años el próximo curso

Hace dos años, el Gobierno central anunció una nueva reestructuración de los estudios universitarios. El objetivo era equipararse a Europa con grados de tres años y másteres de dos. La idea no agradó ni el alumnado (que realizó varias y multitudinarias movilizaciones; la última de ellas, la pasada semana) ni en las propias instituciones académicas (que acordaron una moratoria de dos años para poder planificar la nueva organización). Ahora, una vez superado este tiempo, y con la preparación del próximo curso en mente, el Gobierno ha llegado a un nuevo acuerdo con las universidades españolas.

Este convenio especifica que la mayoría de las titulaciones (biomédicas, ingenierías y pre-Bolonia) mantendrán los cuatro años actuales; las que están marcadas por directivas europeas, como es el caso de Arquitectura o Medicina, también seguirán con su actual estructura; y los grados implantados después de Bolonia serán los que se cambiarán a tres años. No obstante, desde el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte matizan que, en estos casos, las universidades tienen la potestad de implantar esta modificación en la duración cuando lo consideren oportuno.

Ante esta nueva situación, la Universidad de Zaragoza ha decidido no implantar grados de tres años, al menos, el próximo curso académico. “La idea es ir de acuerdo con el resto de universidades de la zona, por ello, entre todas mantenemos el contacto para ver cómo lo organizamos. Obviamente si las de alrededor empiezan a poner grados de tres años, nosotros deberíamos seguir la misma dinámica. Pero, de momento, no es nuestra intención y el próximo curso se mantendrá la situación tal y como está en la actualidad”, asegura Gerardo Sanz, vicerrector de Política Académica de la Universidad de Zaragoza. Según el listado facilitado por el Ministerio de Educación, los grados de Márquetin e Investigación de Mercados, Finanzas y Contabilidad o Lenguas Modernas son algunos de los que podrían pasar a tres años en los próximos cursos.

De momento, Cataluña es de las pocas comunidades que sí que se ha mostrado a favor que implantar grados de tres años. “Están haciendo propuestas muy innovadoras, con grados bastante alejados de los que existen en la actualidad”, explica Sanz. Ejemplo de ello es el de Bioinformática, que impartirá la Universidad Pompeu Fabra (UPF) a partir del próximo curso o el de Diseño y Creación Digital, que se podrá estudiar en la Universidad Abierta de Cataluña (UOC). Todos ellos de 180 créditos, o lo que es lo mismo, tres años de duración. “Esto es algo que también tenemos que valorar. Hay que ir estudiando opciones para adaptarnos a la sociedad actual y a las necesidades del mercado”, subraya el vicerrector de Política Académica de la Universidad de Zaragoza.

Además de analizar cómo enfrentarse al cambio de las titulaciones post-Bolonia, el campus público aragonés está trabajando con el actual programa de másteres. "Queremos hacer una reforma en profundidad", reconoce Sanz. Por un lado, quieren implantar postgrados dirigidos a diferentes carreras. “Hasta ahora lo más típico es que una vez terminada una titulación se pase a un máster de la misma materia. El objetivo es que en un futuro próximo vayan dirigidos a estudiantes de diversas carreras. Por ejemplo, estamos valorando opciones dentro del campo científico-técnico, que puedan ser atractivas para estudiantes de matemáticas, ingeniería e incluso economía”, explica.

Asimismo, la implantación de postgrados va a funcionar como “medidor” del interés de los alumnos en estudiar grados de la misma temática. “La implantación y eliminación de másteres es mucho más sencilla que poner en marcha un grado nuevo. De este modo, con nuevos postgrados podemos comprobar si tendrían demanda como carreras y cómo se podrían estructurar”, reconoce. Un buen ejemplo es que uno de los dos nuevos másteres de Aragón tiene la misma temática que el grado de tres años que implantará este año la UPF (Bioinformática). En el campus zaragozano, esta titulación recibirá el nombre de Biotecnología Cuantitativa: “Será en inglés y la idea es que vaya dirigido tanto a químicos, físicos, matemáticos, biotecnólogos e incluso otras titulaciones”.

Con másteres como estos se puede comprobar el interés del alumnado y de las empresas ante la posible incorporación de un grado, y también si es mejor mantener el actual sistema: que la carrera aporte una formación básica y el máster sea un complemento de especialización, para que "se dediquen a una cuestión ligeramente diferente a la que se iniciaron".

En el curso 2017-2018 también se va a implantar el máster de Filosofía. Este postgrado va dirigido especialmente a los estudiantes de esta titulación, aunque también puede resultar de interés para otros egresados como los de Periodismo.

¿Y los másteres de dos años?

El cambio de grados de cuatro años a tres incluía implícitamente una modificación de la duración de los másteres, que deberían pasar de uno a dos años. Una cuestión que podría estar más cercana en el campus público aragonés que la implantación de los nuevos grados. "Hemos comprobado que en muchos países europeos no se reconocen los másteres que tengan una duración menor a 90 créditos, es decir, un año y medio. Esta es una cuestión relevante puesto que actualmente la movilidad europea es muy importante", asegura Sanz.

De este modo, tendrán que valorar la posibilidad de implantar másteres de 90 o 120 créditos (año y medio o dos) para que estos sean reconocidos en el resto de Europa. "En determinados trabajos los valoran, pero en el ámbito institucional no se les reconoce que tienen un nivel educativo de máster", puntualiza.

Menos precio y adelantar la matrícula

La reforma de másteres que se está llevando a cabo desde la Universidad de Zaragoza comenzó el pasado año con la reducción de las tasas académicas, que se llevó a cabo "con la vista puesta en el futuro, con másteres de más de un año". "Bajamos el precio para que no hubiera una diferencia tan notable entre esta titulación y un grado, como ocurría hasta ese momento. De este modo, sería más similar a las anteriores licenciaturas: un primer ciclo de tres años y un segundo de dos (ambos con el mismo precio)", sostiene.

El último cambio realizado en esta materia se implantará la próxima semana. En este caso se trata del periodo de preinscripción, que pasa de iniciarse entre junio y julio (con una segunda fase en septiembre) a hacerlo la próxima semana. Así lo ha confirmado Sanz, quién ha asegurado que el objetivo de esta medida es que los alumnos conozcan con antelación si tendrán plaza en los postgrados aragoneses y, por consiguiente, se consiga aumentar el número de matriculados.