Clamor en Teruel contra la pérdida de trenes de mercancías en favor del eje de Tarragona

Partidos y agentes sociales exigen a Fomento que invierta en la línea para que esta sea competitiva. Teruel Existe se moviliza para que el Cantábrico-Mediterráneo no vaya por Cataluña

Un tren de viajeros que llegó ayer a Teruel procedente de Valencia con destino a Zaragoza.
Un tren de viajeros que llegó ayer a Teruel procedente de Valencia con destino a Zaragoza.
Jorge Escudero

La decisión de Renfe de desviar el tren cargado de coches de General Motors (GM) por Tarragona en detrimento del eje Zaragoza-Teruel-Valencia bajo el argumento de que es más barato por Cataluña ha levantado ampollas en la ciudadanía turolense, que lleva años reclamando que la línea sea electrificada y su trazado mejorado para que sea competitiva. Partidos políticos y agentes sociales culpan de la pérdida del tráfico de mercancías a la falta de inversiones estatales y exigen al Ministerio de Fomento que apueste de una vez por el camino más corto entre el Cantábrico y el Mediterráneo.

Los ánimos están muy calientes. Teruel Existe ha convocado para hoy una asamblea ciudadana en la que informará de las acciones de presión que tiene previsto llevar a cabo para que el corredor ferroviario que ha de unir el Cantábrico y el Mediterráneo, esperanza de futuro de la provincia, discurra por Teruel y no por Tarragona, como planea Cataluña al reclamar el tercer hilo entre Zaragoza y la capital tarraconense. El próximo 1 de abril habrá concentraciones en Zaragoza y Valencia y personajes vestidos al estilo de los años 20 viajarán en tren entre ambas ciudades.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj (PP), lamentó ayer el desvío del tren de GM y dijo que el deterioro de la línea arrancó en los años 80 con su descatalogación, lo que supuso una progresiva reducción de las inversiones. Buj anunció que, aunque confía en que Fomento cumplirá su compromiso de mejora del eje "a corto plazo", irá a las movilizaciones. "Mi obligación es estar al frente de la reivindicación de los turolenses", subrayó.

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, José Ramón Morro, consideró que el mal estado de la línea se ha "cronificado" y dijo que la única solución es hacer el Cantábrico-Mediterráneo. A su juicio, el problema es que las obras de mejora del tramo Zaragoza-Teruel, "con 500 millones de euros de inversión durante la legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero", no tuvieron continuidad hacia Valencia a partir de 2008.

El presidente del PAR en Teruel, Julio Esteban, denunció que la provincia "está en inferioridad de condiciones respecto a otros territorios" y abogó por "más infraestructuras y menos estudios" para frenar la despoblación. La diputada en las Cortes de Aragón de esta misma formación política, Berta Zapater, opinó que lo ocurrido con el tren de GM "es un golpe más para la línea" y responsabilizó a la DGA de "no hacer nada" para resolver el problema "por no negociar con Renfe".

"La lentitud en todo lo que concierne a esta vía nos está haciendo perder la oportunidad", manifestó, por su parte, Anabel Gimeno, portavoz de Ganar Teruel en el Consistorio. "El territorio necesita ese ferrocarril", subrayó. En el mismo sentido, el presidente intercomarcal de CHA en Teruel, Adolfo Villanueva, reclamó a Fomento que "priorice" la inversión en el eje turolense.

"En bandeja"

Para el presidente de CEOE-Teruel, Carlos Torre, la falta de mejoras en el eje Zaragoza-Teruel-Valencia, por el que, tras la marcha del tren de GM, solo circulará un convoy de mercancías dos veces por semana, "está poniendo en bandeja que el Cantábrico-Mediterráneo se haga pasar por Tarragona". "La vía catalana está electrificada, sin curvas, y funciona las 24 horas al día, mientras tanto, a nosotros nos están ninguneando", denunció.

No menos indignado se mostró el presidente de la federación de asociaciones vecinales, Pepe Polo, que calificó la decisión de Renfe de "puñalada trapera". "¿Cómo no van a ir los trenes por Tarragona, si esa línea está en mejores condiciones?", se preguntó. "Nos han condenado a la muerte –agregó–; ¿cuánto tiempo más nos van a estar engañando?". Para Polo, hay "un gran riesgo" de que el Cantábrico-Mediterráneo se vaya finalmente por Tarragona. "Por allí solo habría que invertir 50 millones, por Teruel, 3.600, para poder arreglar el tramo hacia Valencia".

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