El apoyo económico de la multinacional GMV a la empresa que desarrolla en el aeropuerto de Teruel ensayos de motores para cohetes suborbitales, PLD Space, supondrá para los promotores un fuerte impulso a su proyecto de llevar a cabo vuelos espaciales con un prototipo, denominado Arion 1, que se fabrica en sus instalaciones de Elche (Alicante). Este respaldo garantizará una aportación económica de 6,7 millones de euros.

La apuesta de la multinacional conllevará, asimismo, la construcción en el aeropuerto turolense, donde se realizan los experimentos  de los motores de propulsión líquida –el elemento más singular de su cohete–, un segundo banco de pruebas, en este caso, destinado a ensayar en tierra la nave completa. Será, según señaló Raúl Torres, uno de los fundadores de PLD Space, la única infraestructura de estas características de Europa. El ingeniero destacó que esta actividad va a posibilitar que Teruel se convierta "en el polo tecnológico de las lanzaderas espaciales". "Hasta ahora –continuó– tanto los vuelos como los ensayos en tierra de cohetes completos se realizaban en la Guayana Francesa".

Está previsto que el primer vuelo suborbital con el Arion 1 se lleve a cabo en octubre de 2018 desde la base de lanzamiento de ‘El Arenosillo’ (Huelva), que, al estar en una zona costera, cerca del mar, garantiza un amplio radio de seguridad imposible de asegurar en Teruel. Raúl Torres señaló que para poder llegar a "este importante hito, todo el equipo está trabajando a pleno rendimiento". El Arion 1 será, no obstante, el precedente de una aeronave reutilizable más grande y potente, el Arion 2, destinada a situar en órbita pequeños satélites de hasta 150 kilos de peso. Las previsiones son que el lanzamiento se produzca en junio de 2020.

Mientras que el primero de los prototipos está destinado a experimentos científicos e investigación en el espacio, el segundo pondrá en órbita satélites cuyas aplicaciones van desde el control de cosechas a la vigilancia de fronteras pasando por la evolución de la deforestación. Torres aclaró que la importancia del proyecto radica en que "Arion es un cohete que proporcionará acceso al espacio de una forma frecuente y económica". Agregó que podrá ser utilizado por las agencias espaciales, las empresas privadas y los centros de investigación que en la actualidad "se gastan mucho dinero en simular las condiciones del espacio".

Además de la construcción de nuevas instalaciones en el aeropuerto de Teruel, cuyos primeros trabajos de ingeniería comenzarán durante el primer trimestre de este año, en estos momentos se están introduciendo mejoras y otra estructura de hormigón en el banco de ensayos ya disponible con objeto de realizar las pruebas con las nuevas tecnologías aplicadas en los motores de combustible líquido. Raúl Torres resaltó la importancia que tiene para el proyecto la participación de la Agencia Espacial Europea, formalizada el año pasado.