El nuevo avión militar A400M se estrena en la Base de Zaragoza en vuelo de pruebas

El primero de los aviones que sustituirán a los Hércules C-130 de la Base de Zaragoza ya se puede ver en los cielos de la capital aragonesa. El pasado martes se estrenó el A400M, después de que la niebla de las últimas semanas se disipara y permitiera su salida tras tres semanas encerrado en el hangar al que llegó el día 1 de este mes.

Los pilotos del Ala 31 se han preparado durante varios meses con cursos técnicos para asumir el nuevo avión, pero ahora por fin pueden tomar los mandos en vivo y en directo. Van a estar entrenándose un tiempo, con la ayuda de un equipo de unas 30 personas desplazado de la empresa Airbus Defense de Sevilla, donde se ha construido, antes de que el A400M sea operativo.

Fuentes militares señalaron que se trata de vuelos de instrucción para las tripulaciones, que suelen estar constituidas por cinco personas: dos pilotos, un mecánico y dos dedicadas a navegación y seguimiento.

Los militares de la Base de Zaragoza que tripulan este avión tienen que volar de manera continua para mantener la calificación, que caduca en un mes, lo que exige un seguimiento muy estrecho de la aeronave y más en estas primeras semanas, que son de rodaje tanto para el A400M recién salido de la fábrica de San Pablo en Sevilla como para los pilotos.

En cada salida apenas suelen volar poco más de una hora y cuarto. La aeronave hace el recorrido clásico en la zona aérea para los aviones de transporte Hércules y todavía no ha acometido operaciones como lanzamientos de carga o aterrizaje en pistas de tierra como el aeródromo de Ablitas (Navarra), donde se han probado modelos similares. "El A400M es un proyecto muy complicado para España, pero va a dotar de un nuevo sistema de armas con más capacidades", reconoció Agustín Conde, secretario de Estado de Defensa.