Aragón tramita 65 parques eólicos que sumarían una inversión de 1.500 millones

Los proyectos implican casi duplicar la potencia instalada con otros 1.510 megavatios repartidos por las tres provincias. El Gobierno PSOE-CHA solventa el fiasco por el fallido concurso de 2011 y abre el sector tras años de bloqueo.

Parque eólico de Aragón.
Aragón cuenta con parques eólicos que suman 1.890 megavatios de potencia instalada. rafael gobantes
Rafael Gobantes

El Gobierno de Aragón tramita 65 parques eólicos repartidos por las tres provincias tras cinco años de bloqueo judicial. Su consecuencia será directa para las arcas públicas y la actividad económica, puesto que su construcción supondrá una inversión de más de 1.500 millones de euros y la generación de unos 450 empleos estables para el mantenimiento de los aerogeneradores, según los cálculos de la propia Consejería de Economía e Industria. Estos 65 parques suman 1.510 megavatios, lo que implicará duplicar la potencia instalada en Aragón si finalmente se desarrollan.


El actual Ejecutivo PSOE-CHA se encontró al llegar al Pignatelli con las consecuencias del polémico concurso eólico de 2011, que provocó una cascada de sentencias condenatorias, hasta 35, que paralizaron todo el proceso y generaron una situación de inseguridad jurídica. Como salida, la DGA aprobó el pasado verano un decreto ley que dejó sin efecto la convocatoria de hace cinco años, a la que se llegaron a presentar 475 proyectos y en la que se repartieron 1.206 megavatios de potencia entre 84 parques. Las beneficiarias fueron empresas aragonesas y radicadas en la Comunidad, sin olvidar a las grandes eléctricas.


Fuentes oficiales de la DGA explicaron ayer a este diario que para evitar una nueva retahíla de recursos se optó por hacer una nueva valoración de los proyectos, reconociendo a los que realmente tenían derecho y manteniéndolo a los que lo obtuvieron en 2011 y deberían haber perdido ahora. "Luego hubo que ver cuántos eran compatibles y hemos comprobado que el 98% sí lo son, por lo que en el 2% restante deberán ponerse de acuerdo", señalaron antes de especificar que el proceso ha supuesto sumar 31 nuevas propuestas, algunas de las cuales correspondían a adjudicatarios del concurso inicial.


La controvertida convocatoria solo sirvió para aumentar la potencia de un parque existente, autorizar otros diez nuevos y tramitar otros 44, mientras que el resto desistieron o cayeron en el olvido. "Para agravar la situación, el resto de proyectos que concurrieron estaban bloqueados", lamentaron desde la DGA.

Emplazamientos protegidos

En total, la Administración ha priorizado ahora 95 proyectos que implican un total de 2.094 megavatios. Los 31 que se vieron respaldados en los tribunales tendrán protegida la ubicación designada para sus aerogeneradores (la denominada poligonal) durante 10 años. Suponen 1.138 megavatios.


Este periodo de reserva se limita tan solo a dos años para las empresas que debieron perder sus derechos, pero que para evitar nuevos litigios por responsabilidad patrimonial los ha mantenido la DGA con la condición de ser compatibles con los primeros. Son 64 parques y suman 955 MW.

Preferencia de tramitación

Los 95 proyectos eólicos priorizados disponían hasta el pasado lunes para presentar la solicitud de autorización administrativa, lo que les otorgaba de preferencia al estar en suspenso los procedimientos para el sector. Se han acogido 65 de ellos, que representan el 75% del total.


Con la modificación del marco regulatorio del sector, cualquier promotor puede presentar ya su parque eólico ante la Administración para lograr autorización autonómica con unas condiciones básicas. Así, deberán acreditar, entre otras cuestiones, que cuentan con una solicitud de evacuación a la red y que ha presentado los preceptivos avales. "Así se evitará generar derechos a proyectos especulativos", añadieron.


De este modo, las únicas restricciones al sector se reducen en la actualidad a la lógica localización de emplazamientos en Aragón que garanticen las suficientes horas de viento como para rentabilizar la inversión, así como la capacidad de evacuación de las redes de transporte y distribución de la energía. No obstante, como cualquier infraestructura que afecta al territorio, deberá superar la preceptiva evaluación ambiental. "Ahora ya no caben límites administrativos", señalaron las citadas fuentes oficiales de la DGA.

Tres décadas del primer parque

La nueva regulación pretende dar un "marco jurídico estable para todos los operadores" de un sector que inició su andadura hace justo tres décadas con la instalación del primer parque eólico, de medio megavatio y ahora fuera de servicio. Desde entonces, se han construido un total de 80 parques con 2.090 aerogeneradores que suman 1.1891 megavatios y que representan una cuarta parte de toda la potencia energética instalada en Aragón. Solo le supera por tres décimas la central de ciclo combinado de Escatrón.

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