Retrocede la emancipación de los jóvenes en Aragón por la precariedad laboral

Aragón ha protagonizado el segundo descenso anual más intenso de la tasa de emancipación.

La tasa de emancipación entre los jóvenes aragoneses de 16 a 29 años ha retrocedido notablemente en el último año, hasta situarse en el 18,9 %, a causa del aumento anual de los precios de alquiler y compra de vivienda y de la precariedad laboral.


Según los datos del Observatorio de Emancipación del primer semestre del año del Consejo de la Juventud de España, Aragón ha protagonizado el segundo descenso anual más intenso de la tasa de emancipación, del 20,22 %, entre las comunidades autónomas.


De los 172.658 jóvenes aragoneses de 16 a 29 años, 32.678 viven fuera de su hogar de origen, lo que deja la tasa de emancipación en el 18,9 %.


Pese a que el balance anual de los datos de empleo para la población de 16 a 29 años ha sido positivo, con un incremento del número de ocupados y una reducción del de desempleados, el avance de la ocupación se ha materializado en un aumento de la contratación a tiempo parcial, la temporalidad y la sobrecualificación.


En la actualidad, el 39,6 % de la población joven de Aragón está trabajando y la tasa de paro se sitúa en el 28,6 %, si bien el nivel adquisitivo de los asalariados y sobre todo de los hogares compuestos por jóvenes ha aumentado en los últimos doce meses.


Así, los hogares jóvenes podrían acceder a la compra o al alquiler de vivienda sin dedicar más del 30 % de sus ingresos, pero la emancipación en solitario, hoy por hoy, sería inviable con el nivel adquisitivo de una persona joven asalariada.


El nivel formativo de la población joven de Aragón es similar al de la media España: el 44,2 % de las personas de 16 a 29 años tiene estudios secundarios obligatorios o inferior nivel formativo y el 55,8 % tiene estudios secundarios postobligatorios o superiores, aunque tienen una tendencia mayor a seguir formándose.


Por perfiles formativos, la tasa de emancipación crece conforme aumenta el nivel formativo de los jóvenes a partir de quienes tienen estudios secundarios obligatorios de los que se tienen datos.


Además, Aragón es la comunidad que ha registrado un saldo migratorio con el extranjero negativo más abultado entre los jóvenes de 15 a 29 años.


En el segundo trimestre del año, la población de 16 a 20 años activa de Aragón presenta la cuarta tasa de empleo más abultada de España, del 39,6 %, y la quinta tasa de paro más reducida entre las comunidades, del 28,6 %, aunque hay una mayor exclusión del mercado laboral de las mujeres jóvenes que en el conjunto de las autonomías.


La ocupación a tiempo parcial ha experimentado un aumento anual muy notorio entre las mujeres jóvenes ocupadas de Aragón y las personas de 16 a 24 años, de forma que en la actualidad, 4 de cada 10 personas ocupadas entre estos colectivos están asumiendo una jornada laboral de menos de 35 horas semanales.


Al contrario de la tendencia del conjunto de comunidades, el tiempo medio de permanencia en una empresa de las personas ocupadas de menos de 30 años en Aragón ha aumentado en los últimos doce meses hasta situarse en dos años y siete meses y medio, aunque el número de ocupados que llevan menos de un año en su empresa actual ha crecido significativamente respecto al segundo trimestre de 2015 hasta alcanzar el 43,4 %.


Además, en el segundo trimestre del año, el porcentaje de personas jóvenes subocupadas por insuficiencia de horas en Aragón, del 20,6 %, es el sexto más elevado de España a pesar de experimentar un retroceso anual. Afecta en mayor medida a las mujeres jóvenes, ya que el 29,6 % trabaja menos horas de las que podría asumir, 6,3 puntos por encima de la media de España.


Según el informe, en el último año ha aumentado la precariedad laboral de los jóvenes, tanto por el incremento de la sobrecualificación como por la temporalidad.


En la actualidad, el 57,8 % de los asalariados menores de 30 años que no cursa estudios está en un puesto que requiere una cualificación menor a la que tiene, mientras que la temporalidad afecta al 52,6 % -el 44,3 % de las contrataciones son eventuales, de menos de un año, y las mujeres y las personas de 16 a 24 años sufren la temporalidad más elevada, del 57,8 % y del 67,2 %, respectivamente-.


El 92,6 % de los contratos registrados en el segundo trimestre del año entre menores de 30 años fueron temporales y el 7,4 indefinidos, y aunque se constata un aumento anual del número de contratos indefinidos, su peso es "residual" y solo el 1,5 % de las nuevas contrataciones entre los jóvenes han sido contratos en prácticas.


En el segundo trimestre, el número de jóvenes en paro se situó en 27.435, el 28,6 %, y el desempleo de larga duración afecta al 43,5 % de los parados de menos de 30 años, menos que la media de España. No obstante, más de la mitad de los jóvenes parados y de los desempleados de 25 a 30 años lleva mas de un año buscando trabajo sin éxito.


Además, el 44,5 % de la población joven de menos de 30 años está inactiva (76.793), la gran mayoría porque continúa formándose. En el segundo trimestre, el 84,5 % cursaba algún tipo de estudio y el 9,8 % restante se dedicaba a labores del hogar.


En cuanto la pobreza y capacidad adquisitiva de la población joven, el informe destaca que el año pasado el 18,7 % de los menores de 30 años en Aragón estaba en riesgo de exclusión social, la tasa de pobreza más baja de las registradas por comunidades autónomas.


En el segundo trimestre de este año el nivel adquisitivo de los jóvenes asalariados ha experimentado un leve aumento del 0,20 % y los ingresos de un hogar compuesto por menores de 30 años lo ha hecho un 9,35 %.

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