El Hospital Miguel Servet de Zaragoza ha tenido que trasladar pacientes, incluidos psiquiátricos, a otros centros y abrir camas extra para poder hacer frente a una nueva saturación del servicio de Urgencias. Un pico inusual de enfermos durante la jornada del lunes, en la que se atendieron un centenar de personas más que la media habitual y se llegó a las 433, obligó a la gerencia del sector a tomar medidas para intentar aliviar la presión asistencial. Aun así, ayer por la mañana todavía había 19 camillas en el pasillo, fuera de las salas de observación.

El gerente del sector II (Hospital Miguel Servet), José Manuel Aldámiz, reconoció ayer que en estos momentos hay una "frecuentación alta" al servicio de Urgencias y que se están habilitando recursos para "intentar contener la demanda". Explicó que las salas de observación estaban ayer llenas, incluida la tercera que en los últimos días estaba reservada casi exclusivamente a pacientes de Psiquiatría. De hecho, según detalló, se han enviado a seis pacientes psiquiátricos al Hospital Clínico. "En este momento, no hay ningún paciente pendiente de ingreso de salud mental", puntualizó.

Aldámiz hizo hincapié en que a lo largo de la mañana de ayer se abrieron las "últimas camas" que quedaban libres en el centro sanitario, situadas en la planta destinada a ampliar la Unidad de Psiquiatría. "Pero en estos momentos estaban libres", subrayó. Y añadió: "Creemos que a lo largo del día –por ayer–, podremos recuperar a los pacientes que tenemos fuera". Además, se derivaron ayer otros siete pacientes con otras patologías a otros centros de la Comunidad.

Respecto a las causas que han podido originar este pico asistencial, los responsables sanitarios no encuentran una explicación al no haber llegado todavía la epidemia de gripe, culpable muchos otoños o inviernos de que se saturen los servicios de Urgencias. "Hemos investigado a ver si hay contexto epidémico, si hay algún perfil y no hemos encontrado ninguno. Sí que tenemos cierta preocupación porque hay un número importante de pacientes oncológicos", manifestó Aldámiz, que reconoció que se está trabajando para intentar que los pacientes no sufran ninguna molestia y la gente trabaje de la forma más adecuada posible.

Educación sanitaria

Las repetidas saturaciones de Urgencias del Miguel Servet en los últimos meses han puesto en entredicho los planes emprendidos por Sanidad para evitar estas situaciones. No obstante, el gerente del sector II recordó que muchas veces es una cuestión de educación sanitaria, ya que explicó que un 90% de las personas que acuden a este recurso va "por su voluntad".

Aseguró que se está intentando trasladar un mensaje a la población para que llame al 061 antes de desplazarse a un hospital. "Lo que queremos es que la gente pregunte para intentar evaluar cuál es el punto más correcto de atención y así evitar estas situaciones. La gente tiene que entender que si se apoyase en otros medios podría solucionar de forma menos traumática su problema", concluyó Aldámiz.