Representan a Aragón y difunden la identidad aragonesa en los lugares donde están implantadas. Las Casas y Centros de Aragón en el Exterior realizan diversas actividades a lo largo del año para mantener vivo el vínculo aragonés más allá de nuestra fronteras. Desde 2010, esta cometido es algo más complicado, debido a la disminución de la cuantía que el Gobierno de Aragón destina a estos centros.

Hace 6 años, la partida de subvenciones para Casas y Centros de Aragón en el Exterior ascendió a 438.568 euros, frente a los 199.000 euros concedidos para el presente ejercicio, lo que representa un descenso del 54% menos en este tipo de ayudas recogidas en la Ley autonómica 5/2000 de Relaciones con las Comunidades Aragonesas del Exterior.

La partida para el ejercicio 2016 también es menor que la del pasado año (330.000) y supone un 39% menos. De 2010 a 2013, la cantidad destinada a este tipo de subvenciones fue disminuyendo progresivamente: 438.568 euros, en 2010; 400.000 , en 2011; 386.615, en 2012 y 235.000, en 2013.

En 2014 y 2015, la cuantía volvió a incrementarse hasta los 330.000 euros, la misma en ambos años hasta llegar a la actual subvención, la menor de los últimos años, que como novedad, suprime la partida destinada a infraestructuras y mantiene la destinada a la realización de actividades y destina 10.000 euros para la atención a las situaciones de extrema necesidad de sus socios.

Entre ellos se encuentran los de la Sociedad Aragonesa de Beneficencia de Cuba (3.199,92 euros), la Agrupación Aragonesa de Venezuela (3.138,50), la Colectividad Aragonesa de Chile (2.615,42) y el Centro Recreativo y Cultural Aragonés de Ripollet (1.046,16).

Los 66 agrupaciones aragonesas tienen de plazo hasta el próximo 4 de noviembre para formalizar la documentación solicitada para que la subvenciones sean efectivas. Un plazo “muy breve”, en opinión de Ángel Barón, presidente del Centro Aragonés de Barcelona.

“En nuestro caso, ya teníamos previstas algunas actuaciones sobre infraestructuras pero al suprimirse esta subvención hemos tenido que posponerlas”, revela.

El Centro Aragonés de Barcelona, con más de 2.000 socios, es uno de los centros aragoneses en la diáspora más representativos. Este año, al no contar con subvención para infraestructuras, la ayuda concedida, 4.665,44 euros, supone una disminución del 50% respecto al año anterior.

Barón considera importante este tipo de apoyo por parte del Gobierno de Aragón y aclara que, en el caso del Centro Aragonés de Barcelona, con un presupuesto que ronda los 300.000 euros, no constituye la fuente principal de financiación. Aunque señala que, en general, “estas subvenciones son vitales para que las Casas y Centros aragoneses sigan adelante”.