El Gobierno de Aragón está estudiando "vías de colaboración" entre sus departamentos con el objetivo de reducir el tiempo de respuesta ante emergencias que se produzcan en lugares alejados de los parques de bomberos. Para ello, se analiza la posibilidad de usar los helicópteros contratados para la extinción de incendios forestales. Esta es una de las medidas que incluía la propuesta que la Diputación Provincial de Zaragoza presentó a la DGA recientemente para "racionalizar" los servicios de bomberos, y que ha suscitado un aluvión de críticas y recelos entre los colectivos que podrían verse directamente afectados, como los propios profesionales o los retenes de Sarga con los que se plantea reforzar los parques.

El Ejecutivo reconoce que, tres años después de la entrada en vigor de la ley del fuego, sigue habiendo la misma "dispersión de competencias a las hay que dotar de uniformidad y capacidad de respuesta". Porque la ley obliga a atender una emergencia en un máximo de 35 minutos y, con los medios actuales, ello resulta "imposible" en el caso de muchas localidades aragonesas, especialmente en las provincias de Teruel y Huesca. En esta última ni siquiera hay un servicio provincial y las comarcas asumen estas labores, con grandes diferencias entre unas y otras.

Los afectados no lo ven claro

Para intentar acortar el tiempo de respuesta, los responsables de las consejerías de Presidencia y Desarrollo Rural mantuvieron la pasada semana una primera reunión en la que se puso sobre la mesa la posibilidad de que los helicópteros integrados en el operativo de extinción de fuegos forestales puedan servir, en determinados casos, para trasladar a bomberos profesionales a poblaciones alejadas de un parque y en las que se haya producido un accidente o un incendio doméstico, por ejemplo. El objetivo sería "optimizar los recursos de que se dispone" para mejorar la cobertura de los servicios de emergencias en el medio rural, explican.

Pero los agentes de protección de la naturaleza (APN) de la DGA ya han advertido de que las unidades helitransportadas "son las que más actúan en los fuegos forestales, tanto en el primer ataque, en los conatos y en la estabilización y remate de grandes incendios". Además, la asociación aragonesa de agentes de la naturaleza –que dirigen el trabajo de las cuadrillas y en caso de siniestro son los primeros en llegar y en ejercer como directores de extinción– rechaza la idea de la DPZ de incorporar efectivos de los retenes terrestres como "bomberos auxiliares" para reforzar las plantillas de profesionales.

El colectivo recuerda que "poco tienen que ver" la extinción de incendios forestales y la de fuegos urbanos. Y ante el argumento de que el número de contratados para actuar en el monte es muy grande, afirman que en los últimos años se ha reducido el despliegue y que gracias a los contratados por Sarga y a los APN, muchos incendios se quedan en conatos. Además, alertan de que reclutarlos como bomberos auxiliares tendría un coste adicional.

Desde el sindicato Candidatura Independiente de Sarga coinciden en que "hay diferencias en la formación y las condiciones laborales" y lamentan que esta noticia "crea aún más incertidumbre" sobre su futuro. Esta semana comparecen en las Cortes para explicar su situación y la que viene una delegación aragonesa, incluido el diputado de Podemos Andoni Corrales, participará en el Parlamento Europeo en una ponencia de bomberos forestales en la que efectivos de todo el país pedirán una auditoría sobre los fondos comunitarios destinados a la prevención de incendios en España.

Por su parte, los bomberos inciden en que la profesionalización de su labor "es la garantía de la prestación de un servicio público eficaz e inmediato".