Dos motoristas mueren en Mainar y Cella en sendos accidentes de tráfico
Uno circulaba de regreso a su casa de Almonacid de la Sierra cuando colisionó con un coche. Ni el ocupante de este vehículo ni el del autocar resultaron heridos.
La del domingo fue una jornada trágica para las carreteras aragonesas. Dos motoristas perdieron la vida tras chocar contra un turismo y un autobús cuando circulaban por la N-330 a la altura del municipio zaragozano de Mainar y por la carretera autonómica A-1512 en el término de Cella (Teruel), respectivamente.
El primero de los sucesos ocurrió sobre las 10.10 en el kilómetro 424 de la antigua carretera de Valencia, según fuentes del Centro de Gestión de Tráfico. Aunque todavía se investiga lo ocurrido, al parecer, el conductor del turismo pudo saltarse una señal de stop previa a incorporarse a la nacional y chocar frontolateralmente contra el motorista, según explicó el alcalde de Almonacid de la Sierra, Paco Compés, de donde era natural el fallecido.
Este circulaba de regreso a su pueblo junto a un amigo, que iba en su moto justo detrás, con el que solía hacer escapadas sobre dos ruedas. En cuanto al conductor y único ocupante del coche, de 40 años, sufrió lesiones leves y fue atendido por una ambulancia en el mismo lugar.
José Alberto M. H., de 35 años, estaba casado y tenía dos hijos pequeños. Aunque vivía en Zaragoza, donde trabajaba en una empresa, iba prácticamente todos los fines de semana a su pueblo, donde viven sus padres y de donde también es su mujer.
Este pequeño municipio de unos 700 habitantes se despertó el doming consternado por la noticia, ya que tanto él como su familia eran muy conocidos. "Es un drama para el pueblo. La muerte de este joven ha segado una vida inocente de una familia extraordinaria", dijo el alcalde de Almonacid de la Sierra, Paco Compés, que definió a José Alberto como un joven "jovial, alegre y prudente". Este lunes le harán la autopsia en el Instituto de Medicina Legal.
La otra víctima, vecino de Teruel
En el segundo accidente mortal registrado el domingo, falleció un motorista de 35 años, Álvaro H. S., natural de Santa Cruz de la Zarza (Toledo), pero que residía en Teruel, donde trabajaba como policía nacional desde hacía unos años. "Era un excelente profesional, buen compañero y con mucha experiencia", explicó María Jesús Bustos, comisaria jefe de la Policía Nacional en Teruel. La víctima murió tras colisionar con un autobús cuyos 18 ocupantes, de entre 60 y 70 años, resultaron ilesos.
El accidente ocurrió a las 16.35 en el cruce a Cella que hay en el kilómetro 11 de la A-1512. Por causas que están siendo investigadas por la Guardia Civil, la motocicleta impactó en la parte trasera del autobús cuando este giraba para tomar el desvío a la localidad. El motorista salió despedido hacia el arcén y cuando acudieron los servicios de emergencia ya no pudieron hacer nada por salvar su vida.
Los pasajeros del autobús, que volvían de una excursión a Albarracín, fueron llevados hasta la explanada de Los Planos de Teruel, a la espera de que la empresa de transporte enviara un nuevo autobús y otro conductor para llevarlos de vuelta a Madrid. El chófer que conducía el bus accidentado resultó ileso, pero tras los hechos sufría un fuerte impacto anímico.
"Ha sido muy duro. Hemos oído un fuerte golpe y al ver lo ocurrido hemos quedado todos muy afectados emocionalmente", comentó un pasajero. Otro viajero, Francisco Mateos, relató que le despertó el ruido, que en un principio atribuyó al reventón de una rueda o a un bache. Mateos criticó la "peligrosidad" de las carreteras convencionales. "Las autovías son más seguras", subrayó. El cruce en el que se produjo el accidente no tiene rotonda ni carril central para facilitar el giro.
