Salud Pública ha registrado ya siete casos de meningitis tuberculosa en lo que va de año

La dirección de Salud Pública ha registrado siete casos de meningitis tuberculosa en lo que va de año. Aunque los expertos restan importancia al número de personas tratadas por esta patología y aseguran que son casos aislados y no tienen relación unos con otros, reconocen que a estas alturas de año solo se esperaba que se hubiera diagnosticado un enfermo.

Es el último boletín epidemiológico de Salud Pública el que informa de las personas que han sido diagnosticadas con esta enfermedad de declaración obligatoria. La meningitis tuberculosa está causada por una bacteria llamada ‘Mycobacterium tuberculosis’ que puede afectar al cerebro y a la médula espinal. Algunos de los síntomas que hacen a los médicos sospechar de que puede tratarse de esta enfermedad son fiebre, convulsiones, inapetencia, cefaleas, vómitos...

Los facultativos necesitan normalmente practicar una punción en la columna y extraer líquido de la médula espinal para confirmar el diagnóstico. Además de ser más grave que las meningitis víricas, uno de los problemas de esta patología es que su capacidad de contagio es más elevada.

Por ello, se recomienda tomar una serie de medidas para evitar la transmisión. Normalmente, las personas más próximas al enfermo o que hayan estado en contacto con él tendrán que seguir un tratamiento.

Uno de los aspectos más importantes para hacer frente a esta enfermedad es diagnosticarla a tiempo, ya que los expertos advierten de las secuelas que puede entrañar si no se trata con rapidez. Entre las consecuencias que se le asocian, destacan las lesiones cerebrales, los ataques epilépticos o los problemas de movilidad. Se recomienda, por ello, acudir cuanto antes a un sanitario ante cualquier síntoma.

Por otra parte, el boletín epidemiológico de Salud Pública informa, como cada semana, de la evolución de las enfermedades de declaración obligatoria. Entre otras, destaca la suma de otros dos casos de tosferina esta última semana. Son ya 83 los diagnosticados, cuando a estas alturas del año se calculaba que hubiera 25. Según los expertos, una de las razones a las que se puede atribuir este incremento es al cambio de vacuna acordada hace ya algún tiempo. Esta produce menos efectos secundarios, pero su efectividad podría ser menor.