Ciudadanos destituye a su números dos en Zaragoza al convocar un acto de partidosin permiso oficial

Los líos internos en el seno de Ciudadanos-Aragón no parece tener fin. El secretario nacional de Organización, Fran Hervías, destituyó ayer por la noche al número dos del partido en Zaragoza y responsable de Acción Política en Aragón, Lorenzo Sancho, por convocar un acto de partido sin comunicarlo ni contar con la preceptiva autorización. Además, le ha abierto un expediente informativo junto al otro impulsor de una reunión de afiliados celebrada el pasado viernes en Zaragoza, Miguel Ángel Esteban, secretario del comité electoral en la pasada campaña nacional. "Sancho es un cargo de confianza del partido y es evidente que con su actuación ha roto la confianza", declaró Hervías anoche a este diario.

El secretario de Organización tomó la decisión, que le comunicó por correo electrónico al afectado, tras recibir un duro informe del delegado territorial en Aragón y diputado autonómico, Ramiro Domínguez, en el que solicitaba a la dirección nacional la apertura de un expediente a Sancho y Esteban. A ambos les acusa de "deslealtad" por organizar un "acto paralelo" de partido en una conocida terraza-bar del Parque Grande, a la que se convocó solo a un parte de los afiliados de Zaragoza.

La iniciativa de Domínguez viene avalada, como destacó Hervías, por una treintena militantes, dirigentes y cargos electos, que le han trasladado en los últimos días por escrito sus quejas y malestar por la actuación de Sancho y Esteban, con los que este diario intentó contactar ayer sin éxito. De hecho, el líder del partido en Aragón incluyó dichas quejas en el informe remitido la dirección nacional para que interviniera, como así ha hecho. En estos escritos se reprocha que la mayoría de afiliados fueran excluidos de la reunión.

Hervías señaló que ahora se va a abrir un expediente informativo antes de decidir si se abre otro disciplinario a ambos cargos, que podría acabar con su expulsión. El delegado territorial lo tiene muy claro, ya que manifestó que la convocatoria de una reunión por "cauces oficiales", a través del grupo de Whatsapp del subcomité de Zaragoza, sin conocimiento de la dirección supone una "falta grave". "Vulnera los estatutos", dijo en referencia al artículo que reconoce el derecho de los afiliados a ser informados de las actividades del partido.

Ramiro Domínguez consideró que esta acción pretendía ser "un acto de fuerza" de dos cargos próximos a la portavoz en las Cortes, Susana Gaspar, con la que existen desavenencias internas a las que no hizo referencia. "Me he limitado a cumplir las funciones como delegado territorial, poner unos hechos en conocimiento de la dirección nacional , dijo sin valorar cómo debería acabar el expediente interno.

El dirigente de Ciudadanos señaló que tanto Lorenzo Sancho, que forma parte de la cúpula del partido en Aragón (el comité territorial), como Miguel Ángel Esteban le "puentearon" al convocar una reunión política en Zaragoza. "Es una barbaridad, una deslealtad tremenda no solo a mí, sino al resto de afiliados. Esto último es lo que más me duele", dijo.

Domínguez señaló que no se ha puesto en contacto con los dos cargos para los que pide la adopción de medidas, aunque sí con el máximo responsable de Ciudadanos en Zaragoza, el edil Alberto Casañal. "No he hablado con ellos, pero sí con Casañal, que no estaba al tanto por estar de vacaciones. Me dijo que no le parecía nada bien lo sucedido", dijo.

Las quejas internas que llegaron al delegado territorial muestran el profundo malestar y la división existente en el partido. Varios destacados miembros de Ciudadanos relacionan directamente el "acto paralelo" organizado como un "pulso" del sector de Gaspar, la portavoz en las Cortes de Aragón y miembro de la ejecutiva nacional. El último encontronazo se produjo este verano, cuando el resto de parlamentarios del grupo plantearon el relevo de Gaspar como portavoz, una decisión que fue vetada por Hervías en una reunión celebrada en julio.

La falta de entendimiento entre Gaspar y Domínguez, así como las críticas a la gestión de la portavoz, han salido a colación en los últimos meses y han trascendido en las Cortes. El propio Hervías reconoció hace medio año las "desavenencias internas" en Aragón, que consideró "normales".

Los primeros problemas surgieron en la votación de las agrupaciones de Zaragoza, que fueron impugnadas sin éxito por casi 40 críticos. A esto se sumó después una denuncia penal de militantes expulsados cautelarmente por "dañar" la imagen de C’s, para lo que se utilizó pantallazos de un grupo de Whatsapp en el que participaban y en la que se vertieron críticas a la cúpula. No ganaron la batalla legal, pero aumentó el malestar en un partido en el que tuvo que dimitir en abril uno de sus diputados autonómicos, José Luis Juste, tras conocerse que constaba como director de una empresa de Panamá.