Este jueves, miles de niños de 0 a 3 años se incorporan a las escuelas de educación infantil de Aragón, en concreto, quienes están matriculados en los centros privados (homologados por el Gobierno de Aragón). “De manera genérica, el inicio de curso es el 1 de septiembre, aunque hay padres que prefieren que sus hijos se incorporen más tarde", explican desde la Asociación Aragonesa de Centros de Educación Infantil (Asacei). Por ello, a partir de este jueves llegan la mayoría y el resto suelen hacerlo durante la primera quincena de septiembre. "Siempre hay alguno que se inscribe más tarde, ya que el periodo de matrícula está abierto hasta que se terminan las plazas”, subrayan.

Por su parte, las escuelas públicas sí que tienen un periodo de matrícula establecido. Este año se llevó a cabo a mediados de abril y culminó con todas las plazas adjudicadas. De hecho, cerca de 700 se quedaron sin puesto escolar en las pertenecientes al Consistorio zaragozano. También es diferente el calendario escolar, puesto que inician el curso la próxima semana (el 7 las del Ayuntamiento de Zaragoza y el 8 las del Gobierno de Aragón) y lo finalizan en junio. Por el contrario, las privadas pueden estar abiertas el tiempo que quieran. “Hay unas que cierran julio y agosto, otras solo agosto y alguna se mantiene abierta todo el año. El único requisito en este aspecto es comunicarlo al Gobierno autonómico”, recuerdan desde Asacei.

En cuanto a los precios, también hay diferencias. En las del Ayuntamiento de Zaragoza, las familias pagan en función de su renta y hay un descuento del 50% para familias numerosas, monoparentales, partos múltiples y los que ya tienen hermanos en el centro. El importe mínimo es de 28,50 euros al mes y el máximo de 254, con comedor. Las del Gobierno de Aragón tienen unos costes más reducidos: cuando los ingresos “per cápita” son inferiores a 314 euros mensuales, no realizan ningún pago. Según se van incrementando estos importes, aumenta el precio que debe pagar cada familia hasta llegar a los 112 al mes.

Por su parte, las privadas rondan entre los 150 y los 400 euros al mes, aproximadamente. “Todo depende de las horas que estén los niños, si se quedan al servicio de comedor o no y el centro al que acuden”, explican desde Asacei. A pesar de ello, todas las escuelas infantiles, independientemente de su titularidad, han congelado sus precios debido a la crisis económica. “Todavía no hay suficiente demanda para que nadie se atreva a subir los precios”, recalcan.

Otra opción para aquellos niños que ya tienen dos años es el proyecto de escolarización temprana que el Gobierno de Aragón ha lanzado este año en tres centros aragoneses: Calixto Ariño de Zaragoza, El Parque de Huesca y Pierres Vedel de Teruel. En estos casos, las plazas son gratuitas y se sigue el mismo horario y calendario que el resto de colegios públicos en Infantil y Primaria.

Aumento de la demanda

Durante los últimos años, según los datos del Instituto Aragonés de Estadística (Iaest), el número de alumnos matriculados en los centros de educación infantil de 0 a 3 años ha ido descendiendo. En concreto, mientras que en el curso 2012-2013 había 12.562 alumnos, en el 2014-2015 (última cifra publicada) la matrícula se había reducido hasta los 11.688. “Estos datos se producen por el descenso de la natalidad, la crisis y la competencia desleal en el caso de las privadas”, sostienen desde Asacei. Como ejemplo de este problema recalcan que en Aragón hay “guarderías, ludotecas y otros muchos espacios que se ofrecen para dar los mismos servicios que un centro de educación infantil, pero no tienen que cumplir la estricta normativa autonómica”.

No obstante, este curso la demanda ha sido superior a la de los anteriores. Por ejemplo, las doce escuelas infantiles del Ayuntamiento de Zaragoza han recibido 1.219, lo que supone un 11% más que el año anterior. Además, en las privadas también han vivido este incremento: “Se nota una leve mejora, pero también depende mucho de los barrios. Los que más demanda tienen son los de Parque Venecia, Valdespartera y la zona centro. De hecho, en ellos es casi imposible encontrar plazas libres; mientras que en otros puntos de la ciudad todavía quedan vacantes y van a abrir con aulas cerradas”, sostienen.