Bacterias contra los nitratos, la solución aragonesa que cuaja fuera de Aragón

Una empresa de ingeniería aragonesa ha desarrollado una solución que, según anuncian, podría acabar con el problema de exceso de nitratos que afecta al agua de boca de una treintena de municipios aragoneses. Lo haría, además, a un coste "mucho menor" que las soluciones implementadas hasta ahora.

El producto ya se está vendiendo a explotaciones ganaderas y municipios de otras comunidades, pero en Aragón la idea no termina de cuajar pese a que el año pasado fueron 27 las localidades que tuvieron que declarar en algún momento su agua de boca como ‘no apta para el consumo humano' a causa de los nitratos.

Se trata de un modelo de biofiltración que noNO3 ha conseguido llevar a la escala industrial y que consiste en la eliminación "natural" de los nitratos presentes en el agua. ¿Cómo? Mediante bacterias desnitrificantes capaces de reconvertir el NO3 (nitrato) en N2 (nitrógeno) de modo que al recuperar el estado gaseoso deja de ser soluble en el agua.

Juan Sala, ingeniero industrial y director de noNO3, considera que la falta de capacidad de inversión en Aragón impide adoptar estrategias autonómicas contra los nitratos, incluso tratándose de soluciones que resultan más económicas y fáciles de mantener. "Otras comunidades con problemas de características similares han recibido más ayudas en este sentido que Aragón", asegura el ingeniero.

Los sistemas implementados hasta ahora en Aragón no solucionan de manera definitiva el problema de los nitratos, sino que lo trasladan, ya que filtran el agua para el consumo por lo que generan un importante volumen de agua residual que vuelve a los ríos todavía más cargada de nitratos que la anterior para abastecer al siguiente municipio.

“En la biofiltración, el agua de rechazo está libre de nitratos, se reutiliza, por ejemplo, para el riego y además no supera el 10% del agua producida”, expone Juan Sala. Según informa, el coste productivo de este sistema no superaría los seis u ocho céntimos por metro cúbico de agua limpia generada y la inversión inicial del equipo para un municipio de unos 200 habitantes rondaría los 40.000 euros frente a los 420.000 que ha costado en La Portellada llevar el agua al pueblo desde una nueva captación y cambiar toda la red de abastecimiento.

Otra localidad como Bello también baraja soluciones como la de traer el agua de otro pozo e invertir unos 400.000 euros. En Pozuelo de Ariza, la potabilización del agua les costará 41.074 euros para abastecer a sus 23 habitantes.

noNO3 tiene proyectos de bioflitración en fase de ejecución en distintos municipios, poblaciones y empresas de las provincias de Toledo, Murcia, Baleares y Cataluña. "Son muchos los municipios fuera de Aragón que reciben ayudas para solucionar sus problemas de nitratos en el agua de boca", explican.

Sala asegura que su ingeniería es la única que apuesta "con decisión" por la biofiltración para el tratamiento de agua potable en Aragón y de las pocas que lo hacen en España aunque, indica, que en países como Alemania, Holanda o Dinamarca es normal el tratamiento del agua potable mediante bacterias. Considera, además, que “hace falta un cambio de percepción en la sociedad española” para no asustarse en cuanto se escucha la palabra ‘bacterias’ para el tratamiento de agua potable.

Los nitratos

Los nitratos son compuestos químicos inorgánicos que se encuentran de forma natural en suelos, alimentos y aguas. En grandes cantidades resultan peligrosos para la salud porque una vez en el estómago se transforman en nitritos, pasan a la sangre y transforman la hemoglobina en metahemoglobina. La hemoglobina es la proteína de la sangre encargada de transportar el oxígeno a las células y tejidos. La metahemoglobina pierde esa capacidad y puede provocar la asfixia.

La comunidad europea y el Ministerio de Sanidad español fijan los niveles máximos de nitratos permitidos en aguas destinadas el consumo humano en 50 miligramos por litro. A partir de 25, desaconsejan su consumo en niños y mujeres embarazadas.