Casas de oro

El lujo inmobiliario no es extraño a la Comunidad: en diferentes rincones se pueden encontrar viviendas excepcionales (desde castillos a pueblos enteros) en venta por cientos de miles de euros.

La noticia saltó hace ya algunos años: existían aldeas enteras situadas en Aragón que estaban en venta. Núcleos enteros, sobre todo en la provincia de Teruel, que uno puede adquirir si tiene unos cuantos cientos de miles de euros en su cuenta bancaria. En una búsqueda rápida en portales especializados pueden encontrarse dos aldeas de la Comunidad en venta. Pueden ser más: si por algo se caracteriza este mercado de propiedades singulares y exclusivas es por su opacidad.


Sobre los pueblos en venta, apenas se da una localización aproximada. Los detalles se reservan para los compradores potenciales, no se prestan a la curiosidad del resto de mortales. Una de las aldeas que busca comprador está situada precisamente en la provincia de Teruel. Se trata de un terreno de 24 hectáreas en el que hay varias construcciones, algunas de ellas del siglo XVI, según consta en los anuncios. Actualmente se vende por 495.000 euros, lo que supone una rebaja de 74.000 euros con respecto al precio inicial. De la propiedad se dice que está cerca de un río y que alberga pinos y pastizales. Sus 15 habitaciones, salones y cocinas la convierten en una candidata perfecta a complejo turístico "con sabor medieval", según dicen sus vendedores.


La otra aldea que busca dueño está en Huesca, a mitad de camino entre la capital y Jaca. Tiene la nada desdeñable extensión de 1.150 héctareas que hace que su precio esté solo al alcance de unos pocos: se vende por 3,45 millones de euros. El anuncio dice que cuenta con pastos y pinares, por lo que se puede utilizar para establecer una ganadería o como coto de caza. El núcleo de la finca, según se especifica, cuenta con una atalaya desde la que pueden disfrutarse unas increíbles vistas del Pirineo.


Estas dos propiedades representan tan solo dos ejemplos de un mercado inmobiliario, el del lujo, que también tiene un importante nicho en Aragón. Castillos, conventos, hoteles, bodegas... Hay fotos de masías turolenses rehabilitadas, con sus muros de piedra originales, que para nada desmerecen las imágenes que aparecen en portales como Sotheby's Realty o John Taylor, empresas especializadas en comercializar casas de lujo en todo el mundo.


Entre ellas destaca una propiedad del siglo XVIII, de algo más de 300 m2 y totalmente rehabilitada. Desde del jardín, donde incluso se ha instalado una piscina, la vista se pierde entre pinares y olivos. Está a la venta por 595.000 euros. 


Otras muchas de ellas superan la barrera del millón de euros. Es el caso de una casa palacio en venta en Rubielos de Mora. Data del siglo XVI y fue residencia del obispo Joaquín Sánchez Cutanda. Las estancias conservan una esencia histórica que elevan el precio de venta hasta los 1,4 millones. Tiene alrededor de 1.400 m2 en los que caben, además de múltiples salones y dormitorios, establos, terrazas y hasta una capilla.


En venta también está, aunque no se diga en el anuncio, la torre del castillo de Olvena. En ningún momento aparece el nombre de la localidad oscense, pero por las fotos que se publican es fácilmente reconocible. Se trata de otra propiedad singular. "La torre y los muros del castillo están en perfecto estado, con piedra granítica de sillería. En caso de querer habilitarlo la obra es sencilla y de bajo coste", refleja el anuncio que añade que los interesados también pueden adquirir "un palacio que se encuentra al otro lado de la plaza de 420 m2 construidos". ¿El precio de la torre? 600.000 euros.


También se repite esta discreción con una propiedad en Monzón. En concreto, con la vivienda que Azucarera Española construyó para el director de la fábrica en la localidad oscense allá por 1888, según se consta en algunas publicaciones. El edificio, que está catalogado, está enclavado en una finca que supera los 3.600 m2 y tiene algo más de 1.200 m2 construidos. "Los detalles interiores son los propios de la construcción de la época", se dice en el anuncio: suelos cerámicos, balaustradas originales, escalera de madera noble... "Los muebles son únicos, personalizados y adaptados a cada espacio". El precio va en consonancia con la singularidad de la propiedad: se vende por 1,25 millones de euros.


La casa del director de la azucarera en una postal antigua


La casa del director de la azucarera en una postal antigua (Todocoleccion.net)Interés internacional

Estas propiedades únicas llaman la atención de muchos compradores extranjeros que buscan comprar una vivienda en España para retirarse, abrir un negocio o simplemente para pasar las vacaciones. En la zona del Matarraña se cuentan por decenas los ciudadanos foráneos que regentan negocios de hostelería en masías rehabilitadas. Para atender la demanda incluso han nacido inmobiliarias especializadas en este nicho de mercado.


El Matarraña atrae, sobre todo, a europeos, pero estos extranjeros no son los únicos que están invirtiendo. El ladrillo aragonés busca también compradores en China y Rusia, mercados emergentes con mucho poder adquisitivo cuyo interés en España se vio acrecentado por la decisión del Gobierno central de conceder permisos de residencia de entre uno y dos años, a aquellos extranjeros que adquirieran terrenos o viviendas valorados en más de 500.000 euros.

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