Los cacos no se van de puente

Aseguradoras y cerrajeros destacan que en estos días se suelen producir más robos.

Cerrar siempre la puerta con llave, una de las acciones más importantes para evitar robos.
Cerrar siempre la puerta con llave, una de las acciones más importantes para evitar robos.

El verano se convierte en la época elegida por los ladrones para poner en marcha toda su maquinaria, pero es este puente de agosto cuando más casos se suelen producir. Al menos, así lo confirman aseguradoras y cerrajeros. “Los ladrones aprovechan que en el puente del 15 de agosto casi todo el mundo está de vacaciones o en los pueblos, por lo que realizan una selección de cuáles son las viviendas más vulnerables”, detalla Roberto García, miembro de la Unión de Cerrajeros de Seguridad (UCES) y dueño de Cerrajería García en Zaragoza. Prueba de ello es que, el año pasado, una banda eligió el puente de la Virgen de Agosto para poner en marcha su actividad delictiva. Al comprobar que durante estos días pudieron asaltar sin problemas tres viviendas, continuaron hasta que en septiembre se les detuvo tras desvalijar más de 40 pisos.


“En Aragón, como en el resto de comunidades autónomas, se detecta un incremento de robos e intentos durante este fin de semana”, explican desde Securitas Direct. Asimismo, puntualizan que la comunidad aragonesa no suele ser una de las más afectadas por esta cuestión. “Estos casos suelen ser más acusados cuanto mayor tamaño tiene la ciudad, por lo que Zaragoza es la provincia de Aragón en la que más saltan las alarmas antirrobos durante estos días”, aseguran. De hecho, en su ranquin privado, Zaragoza está en un puesto intermedio entre todas las provincias españolas, Huesca se encuentra en la trigésimo novena posición y Teruel es la menos afectada.


Por todo ello, recomiendan que estos días se intente evitar que la casa parezca abandonada. “Para ello es fundamental que los vecinos colaboren. Por ejemplo, si se sabe que el de al lado está de vacaciones, controlar si hay algún movimiento extraño y ante cualquier cambio, llamar a la Policía”, solicita García. Que las persianas no estén completamente cerradas y que el buzón no se llene son otras recomendaciones. Sobre franjas horarias no hay una determinada. “Durante el resto del año es más habitual que roben entre las 11.30 y las 13.30, que es cuando se hace la compra o se lleva a los niños al colegio; pero en estos días, cualquier hora es buena”, recalca. También destaca que no hay una vivienda tipo. “He visto robos hasta en pisos de estudiantes que no tenían ni para pagar el servicio”, asegura.


A pesar de todo, se espera que en este puente se produzcan menos expolios que otros años, ya que en julio se detuvieron a una docena de delincuentes especializados en este tipo de asaltos. Esto conllevó la desarticulación de dos bandas de carácter itinerante: una de georgianos y otra de mujeres serbocroatas. Por ello, la Policía Nacional ha subrayado que confían en que los robos se reduzcan en los próximos meses.

Recomendaciones

Las recomendaciones para intentar evitar este tipo de robos son muy variadas. Desde Securitas Direct destacan que se cierren todas las ventanas y la puerta con llave y que se desconecte el geolocalizador del teléfono móvil. Esta última va en concordancia con las realizadas por la Policía Nacional, que pide a los ciudadanos que no anuncien sus vacaciones a través de las redes sociales. Asimismo, solicitan que no desconecten el timbre, que nunca escondan una llave de emergencia en las proximidades de su casa y que no dejen en su domicilio objetos de elevado valor.


Y es que robar es cada día una “técnica” más profesionalizada. “Los procedimientos están en continua evolución, hay herramientas como la 'magic key' que la venden directamente por internet y permite que no se fuerce la cerradura. Sin embargo, los ciudadanos no ponemos todas las medidas que podríamos. Solo lo hacemos cuando ya nos han entrado en casa o cuando le ocurre a algún vecino o conocido”, lamenta García. Según señala, en Zaragoza hay miles de viviendas que tienen las cerraduras más fáciles de abrir, que son las de borjas (aquellas que tienen doble paleta). “Hace años, se utilizaban mucho y ahora están en una gran cantidad de edificios”, detalla.


Por ello, recalca que la mejor opción es la prevención. “Lo primero que debemos mejorar es la entrada al portal, intentando evitar aquellas cerraduras que se pueden abrir con la tarjeta y después centrarnos en nuestra vivienda”, subraya. Allí hay que prestar especial atención a la cerradura, al bombín y al escudo protector. “No se puede estar treinta y cuarenta años sin cambiarlos. Al igual que el coche, hay que modernizarlo para evitar disgustos”, sostiene. Al mismo tiempo, recomienda el uso de alarmas: “cualquier precaución siempre es bienvenida”.

¿Símbolos en las puertas?

El 'modus operandi' puede ser variado, dependiendo especialmente de si se tratan de bandas o personas individuales. No obstante, lo normal es que se entre en el edificio y se miren los tipos de cerraduras y de puertas que hay, “para conocer la facilidad de acceso”. “Si una cerradura es complicada, ni lo intentan. No les merece la pena”, apunta García. Posteriormente, según detallan desde la federación de cerrajeros y la Policía Nacional, marcan con un pequeño trozo de plástico las viviendas que les interesan y a los dos días vuelven a revisar. “Si la marca se ha caído es porque hay gente, pero si sigue allí, se convierte en un blanco perfecto”, especifica.


También hay quien habla de que pueden aparecer símbolos en las puertas. De hecho, algunos cerrajeros lo añaden en sus tarjetas de visita en la capital aragonesa. Sin embargo, la Policía Nacional descarta que la manera de funcionar sea esta y lo achacan a una leyenda urbana.

Los negocios, otro punto caliente

Otro de los inmuebles más afectados por los robos estos días son los negocios. De hecho, según el estudio realizado por Securitas Direct, en Aragón, un tercio de los robos se producen en viviendas; mientras que el resto se dan en empresas. “Generalmente se producen en locales abiertos al público, aunque también son comunes en naves industriales y oficinas”, puntualizan. En muchos de estos casos, al estar abiertos al público, las medidas de seguridad que se pueden aplicar no son tan amplias y se reducen a algún tipo de alarma para avisar a la policía.

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