La mayoría de los alumnos que entran en primera opción en las carreras 'estrella' no son de Aragón
En Veterinaria o Medicina,hasta un 75% de solicitudes llegan de otra comunidad.

Es miércoles por la mañana, y en el edificio de Interfacultades decenas de personas consultan las listas de admitidos en los distintos grados de la Universidad de Zaragoza. Una hija y su padre se detienen en el panel de Medicina. A pesar de que la joven ha obtenido un 12,2 en selectividad, se encuentra en lista de espera. El progenitor se indigna: "De los 300 admitidos en primera opción, solo unos 90 son de Zaragoza. Cuando en la Universidad dicen que no viene tanta gente de fuera, no sé a qué carreras se refiere", se duele. Ante la decepción de su hija, también critica que determinados controles de las pruebas de acceso a la Universidad (PAU) sean más difíciles que en otras autonomías, lo que en su opinión baja la nota final de los aragoneses y permite el paso de los solicitantes desde fuera de la Comunidad.
El caso de Medicina, con ser llamativo, no es el más destacado. En otros estudios con gran demanda en la Universidad de Zaragoza, los aragoneses no suponen ni el 20% de los admitidos en julio. Para entrar en Veterinaria, por ejemplo, se ha exigido un 11,318 este año, de los 14 puntos que pueden llegar a alcanzarse en selectividad, tal ha sido la avalancha de peticiones para sus aproximadamente 250 plazas disponibles. Y sin embargo, poco más de 40 peticionarios proceden de Aragón. Así ocurre también con Odontología, que se imparte en Huesca y cuya nota de corte ha sido en julio de 11,82. Del distrito universitario aragonés apenas hay 16 demandantes, de los 80 aceptados en primera opción.
También altas son las cifras de Enfermería o Fisioterapia, ambas con una calificación mínima de 11. En la primera, unas 100 de sus 220 vacantes han ido a parar a alumnos de fuera de Aragón, y en la segunda el porcentaje es aún mayor (30 autóctonos de unas 70 plazas).
De esta forma, las carreras estrella acogen a muchos más foráneos que aragoneses, en una proporción que cada mes de julio, en primera opción, destaca por su desequilibrio. Sin embargo, y a pesar de las quejas que cada año se producen, la Universidad insiste en que, una vez comenzado el curso, en las aulas el porcentaje de aragoneses acaba siendo muy superior. "Son tópicos. La realidad objetiva es que en gran parte de las titulaciones los aragoneses suponen el 90% del alumnado", informa Fernando Zulaica, exvicerrector de Estudiantes y encargado en los últimos 9 años de la PAU.
Zulaica admite que la única excepción es Veterinaria, ya que, durante años, la facultad zaragozana era la única que existía, junto a las de León, Madrid y Barcelona, lo que la convirtió en destino de todo el país. Pero, a pesar de la creencia generalizada, el docente deja claro que no pasa lo mismo en Medicina, la carrera con más demanda y en la que este año se han quedado fuera 5.500 solicitantes entre Zaragoza y Huesca. "Allí el 75-76% de estudiantes acaba siendo de Aragón. Si cada año tenemos 3.800 solicitantes en Medicina es imposible que sean todos de aquí. Pero muchos se inscriben también en Granada, Canarias, Santiago... Y si les dan plaza en su tierra, acaban quedándose allí y dejan su plaza en Zaragoza o Huesca libre", cuenta Zulaica.
Respecto a las quejas sobre que un examen de selectividad más difícil puede suponer quedarse fuera de una titulación, Zulaica lo considera "una leyenda urbana". Este año, en la Universidad se revisaron los exámenes de Biología, Química y Dibujo, pero finalmente se decidió no repetir los controles, sino corregir con más detalle aquellas preguntas que podían tener varias interpretaciones. A pesar de las protestas recibidas, el responsable de la PAU dice que esta acusación de parcialidad se realiza cada año, pero que los datos que se extraen del proceso en todo el país no la corrobora. "Un examen puede ser más difícil aquí, pero otro de otra materia puede serlo en otra Comunidad. No se puede generalizar", lamenta.
Además, apunta, "siempre hay segundas oportunidades". "Si un alumno está en los primeros puestos de las lista de espera, es fácil que entre. También puede presentarse a la fase específica de selectividad en septiembre y optar a su carrera deseada el siguiente año. O apuntarse a otra titulación y tratar de acceder doce meses después a la preferida", aconseja.