¿La puntilla para las 500 cabinas telefónicas aragonesas?

Puede ser la puntilla a uno de los elementos urbanos más reconocibles de las últimas décadas. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha propuesto al Ministerio de Industria que revise la obligación de mantener las cabinas telefónicas dentro del denominado servicio universal.

Es decir, que se levante la protección que existe sobre ellas, dado el escaso uso que hacen los ciudadanos de los teléfonos públicos y el elevado coste de mantenimiento. El problema es que muy pocas son rentables por sí mismas, y según la CNMC, de los 400.000 euros anuales que debía sufragar el Estado para que siguieran operativas, se pasó en un solo año al triple, 1,2 millones.

El número de cabinas en España ha caído desde las 108.899 que había en el año 2000 a las 34.735 registradas en 2014. Una tendencia similar a la registrada en Aragón, donde apenas sobreviven algo más de medio millar, las que establece el servicio universal según la población actual en la Comunidad autónoma. En 2012, superaban las 900, por lo que se han reducido casi a la mitad en tres años.

La mayoría de ellas se ubican en la capital aragonesa, según el buscador interactivo que ofrece Telefónica, la encargada de su mantenimiento. Mientras que el número de teléfonos públicos es residual en otras localidades como Huesca, con 19, Teruel (11), Calatayud (9), Barbastro (7), Monzón, Alcañiz y Ejea (6) o Jaca (5).

El Real Decreto 424/2005 sobre las condiciones para la prestación de servicios de comunicaciones electrónicas, el servicio universal y la protección de los usuarios estipula en su artículo 32 que “se deberá garantizar la existencia de una oferta suficiente de teléfonos públicos de pago” concretamente establece la cantidad de “un teléfono público de pago y uno más por cada 1.500 habitantes en cada municipio de 500 o más habitantes y de un teléfono público de pago en cada uno de los municipios de menos de 500 habitantes”. En la comunidad aragonesa, este decreto estipula el mínimo de cabinas telefónicas en 508.

Pero el 88% de los españoles aseguraba en un reciente Eurobarómetro que nunca han utilizado las cabinas, lo que sitúa a España al nivel de la media europea. “Francia decidió recientemente excluir las cabinas del servicio universal, lo que permitirá a Orange empezar a desinstalarlas”, argumenta Competencia.

Listines telefónicos e internet

Pero no es su única petición. La CNMC solicita igualmente acabar con el blindaje de servicio universal que rige sobre los listines telefónicos, ya que “un 52% de los españoles no ha usado nunca guías de abonado en papel y nadie afirma usarla más de una vez al mes”, señala. Desde 2014, las guías de abonado en papel sólo se envían bajo petición.

En cambio, en cuanto a la banda ancha de 1 Mbit/s de internet, también incluida en el servicio universal, 445.199 líneas en España no tienen cobertura a esta velocidad (el 2,5% del total de accesos fijos). Por ello, la CNMC considera necesario mantener la protección a esta conectividad dentro del servicio universal. “Los niveles de cobertura de banda ancha a 1 Mbit/s oscilan entre el 99% de la Comunidad de Madrid y Melilla y el 94 % de Galicia y Castilla y León”, recuerdan.