El concejal que fue a prisión con Pinilla asegura que la exalcaldesa dio al menos dos contratos a dedo

El que fuera concejal de Medio Ambiente y Obras Menores del Ayuntamiento de La Muela, Juan Carlos Rodrigo Vela, no tuvo ayer ningún reparo en señalar a la exalcaldesa, María Victoria Pinilla, como la persona que decidía a quién se daba una obra o en qué momento se rescindía un contrato para adjudicárselo a otra empresa. De hecho, el exedil aseguró que fue esta quien le indicó que había que adjudicar a Ente Gestor de Nuevas Tecnologías del Agua (NTA) el servicio de abastecimiento al municipio y a Construcsa, la ejecución de una pasarela para ganado sobre la autovía de Madrid (A-2). A la que fuera máxima responsable del consistorio de La Muela, sentada en el banquillo a un metro escaso del declarante, no le quedó otra opción que la de aguantar el ‘chaparrón’ y esbozar gestos de reproche cada vez que quien llegó a ser a su mano derecha apuntalaba su condena.

De las 18 primeras personas que detuvo la Policía Nacional en el marco de la Operación Molinos el 18 de marzo de 2009, el juez solo ordenó el ingreso en prisión provisional de tres: la regidora, el empresario madrileño José Carlos Fernández Delgado (Brocover) y el concejal Juan Carlos Rodrigo Vela. Aunque este último logró salir a los tres meses tras depositar 150.000 euros de fianza, parece que todos sus esfuerzos se encaminan en la misma dirección: no tener que regresar al centro penitenciario de Zuera. Y en caso de hacerlo, que sea por el menor tiempo posible. De ahí que en las vísperas del juicio Rodrigo Vela, al que asisten los abogados Fernando Lacruz y Alejandro José Sarasa, alcanzara un acuerdo con la Fiscalía Anticorrupción de Zaragoza para reducir lo máximo posible su condena. Porque son siete los delitos de los que se le acusa –dos de prevaricación, otros dos de cohecho, malversación, fraude de subvenciones y tenencia ilícita de armas– y 17 años de prisión a los que se enfrenta.Reconoce que se llevó dinero

Pero los pactos tienen un precio y al exconcejal le tocó ayer poner su parte. Por un lado, identificando a María Victoria Pinilla como la persona que adjudicó al menos dos contratos a dedo. Y por otro, admitiendo que también él sacó partido de los presuntos amaños al ser el receptor y beneficiario de ciertas entregas de dinero. Al hacerlo, desdijo la declaración que el pasado lunes hizo el empresario y socio de NTA Antonio Fando, para el que se piden 10 años de cárcel. "Es cierto que Fando me dejó 2.000 euros en un sobre. No eran para el pago de ninguna nave –que es lo que dijo el primero–, eran una recompensa por los servicios prestados", manifestó el concejal a preguntas de la Fiscalía.

En su condición de edil responsable de Medio Ambiente, Rodrigo Vela formó parte de la mesa que otorgó a la empresa de Fando la gestión del agua en el municipio. "Mariví me dijo que había que dárselo a NTA, pero yo entonces no conocía de nada a Fando", reconoció. La relación con este se forjó después, como demuestran las conversaciones telefónicas que grabó la Policía y en las que se habla, por ejemplo, de "una fiesta con los del agua" con"unos pelotazos tremendos". Al oír esto, su interlocutor le contesta: "Eso es lo tuyo, eso es lo tuyo, ¡los pelotazos!"

Otra de las escuchas probaría que Antonio Fando y Juan Carlos Rodrigo Vela acordaron también la revisión al alza de una factura de NTA. Lo hicieron perjudicando los intereses del Ayuntamiento de La Muela y con el objetivo de repartirse después la diferencia. "Me avergüenzo y me arrepiento. Ya no sé qué más decir", acabó afirmando el concejal.