Podemos evita poner líneas rojas al presupuesto pero avisa que hay fricciones

El presidente del Grupo Parlamentario de Podemos en las Cortes, Pablo Echenique, ha asegurado este martes que su formación no va a poner líneas rojas a la negociación del presupuesto de la comunidad para 2016, pero también ha advertido de que se detectan "puntos de fricción muy importantes" con el gobierno en asuntos en los que su partido va a mantener "un posicionamiento firme".

Este miércoles se reunirá en las Cortes de Aragón por primera vez la ponencia que estudia las más de 1.200 enmiendas presentadas por los grupos a los presupuestos de la comunidad para 2016, unas cifras que para Echenique, según ha dicho en rueda de prensa este martes, no son "las del PP" pero sí "bastante continuistas" porque no suponen "un cambio radical".

Ha rehusado avanzar cual podría ser el sentido del voto de Podemos en la sesión plenaria prevista para el 28 de este mes en la que se debatirán y votarán de forma definitiva las cuentas de Aragón para este año, y en función de las enmiendas que les sean aceptadas en la ponencia tomarán una decisión al respecto.

"Estamos intentando minimizar los daños, introducir medidas urgentes e importantes donde hay lugar para hacerlo", ha precisado Echenique, quien no obstante ha asegurado que la decisión sobre el sentido del voto no se tomará "en ningún caso" en función de una medida concreta, sino que se hará una "valoración global" acerca de si los presupuestos tienen en cuenta sus prioridades, centradas en la emergencia social y los servicios públicos.

Echenique ha lamentado que "el cambio" que ha llegado a los parlamentos aún no se vislumbre en los gobiernos, que siguen en manos de "partidos viejos", como es el caso de Aragón, donde el PSOE "ha mantenido a la vieja guardia" y ha "incumplido sus compromisos".

En este sentido, ha lamentado que la "tinción morada" que se vio en un primer momento en los presupuestos para 2016 no haya aguantado "ni la primera lluvia fina", y es que, a su juicio, las cuentas de la comunidad siguen "maniatadas" por el techo de gasto, el control del déficit y los mercados.

El "margen" que tenía el gobierno y que, a juicio de Echenique, no ha aprovechado se centra en el mantenimiento de redes clientelares, en el derroche de recursos en grandes proyectos y en la elección que ha hecho de "regatear" 40 millones de euros en la renta social básica, que se proyectó en principio con 80, según el líder de Podemos.

Este martes, Podemos ha detallado dos de las enmiendas que presentan al articulado y con las que pretende dar la vuelta a estas cuestiones.

La primera, para conseguir un control parlamentario de todas las modificaciones presupuestarias que el gobierno pretenda hacer en el presupuesto después de aprobado éste.

Así, ante cualquier modificación de crédito mayor de 100.000 euros, las Cortes de Aragón podrán activar un proceso de autorización siempre que lo pidan un quinto de los diputados de la Cámara (es decir, catorce, justos los que tiene Podemos), proceso que se activará de forma automática si la modificación es superior a 500.000 euros.

La segunda enmienda se refiere a los ingresos sobrevenidos que pueda tener la comunidad, al margen de los presupuestados, por venta de patrimonio o por incrementos de recaudación por mejoría de la situación económica.

Podemos pretende garantizar que, en el caso de las cuentas de 2016, estos ingresos se destinen "necesariamente" a la inversión pública en educación, sanidad, servicios sociales, vivienda y fomento del empleo.

La portavoz de Podemos, Maru Díaz, ha explicado que se pretende evitar que el gobierno tenga "libertad absoluta" para destinar estos ingresos sobrevenidos a lo que le parezca, y por eso se pretende que cada año se especifique a qué se dedicarán estos recursos adicionales.

El destino, ha precisado, puede cambiar cada año en función de la urgencia social de cada ejercicio.