Los baremos del proceso de escolarización cambiarán en Aragón. Esta era una decisión anunciada por el Ejecutivo autonómico que finalmente se ha trasladado al papel con la salida a información pública del nuevo decreto para solicitar plaza escolar. La modificación más significativa se encuentra en la puntuación que recibe la cercanía del domicilio y el trabajo respecto al colegio.

En la última orden, ambas cuestiones tenían el mismo valor y gozaban de 6 puntos. Ahora, con el nuevo decreto que propone el departamento de Educación, Cultura y Deportes -todavía pueden presentarse alegaciones y producirse algún cambio-, solo se obtendrían 6 puntos si el domicilio está en la misma zona que el centro elegido. Sin embargo, si es el lugar de trabajo de cualquiera de los padres, esta puntuación desciende a 5. Lo mismo ocurre si se desea un colegio en las zonas limítrofes a la que le corresponde. Anteriormente se daban 3 puntos indistintamente y ahora se mantienen para los que tienen la vivienda allí, pero por cercanía al trabajo solo se logran 2.

Estos cambios afectan a toda la comunidad, pero en Zaragoza se produce algún cambio adicional, ya que se tiene en cuenta otra disposición: la distancia a un kilómetro lineal con el colegio. En este caso, los que vivan en la zona escolar -o en una limítrofe- y estén a menos de un kilómetro tendrán 7 puntos. Aquellos cuyos padres tengan el trabajo en la misma área y cumplan las circunstancias de proximidad lineal obtendrán 6 puntos. Si es en una zona limítrofe lograrán 5,5. Además, si el domicilio familiar o el lugar de trabajo está situado en otra zona, pero se encuentra a un kilómetro lineal del colegio dan 4 puntos.

Tanto desde algunos sindicatos como desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos de Aragón (FAPAR) han valorado de manera positiva estas medidas. “Es una cuestión que llevábamos reivindicamos mucho tiempo, ya que consideramos que es positivo que el niño vaya al colegio en el barrio en el que vive”, subraya José Luis Ruiz, secretario general de Enseñanza de CGT Aragón.

No obstante, estas modificaciones también afectan a aquellos padres que trabajan en el centro escolar seleccionado, ya que ahora solo proporciona 2 puntos adicionales, tres menos de los que facilitaba antes. Una medida que no es del agrado de todos. “Siempre hemos defendido la igualdad entre la vivienda y el trabajo para mejorar la conciliación, y más si tenemos en cuenta que los padres trabajan en el centro educativo”, subraya Gloria Pardillos, secretaria general de Educación de UGT Aragón. Una opinión que secundan desde FSIE. "Aunque estos dos puntos sumados a los 5 o 6 -si no se vive dentro de la zona de escolarización- dan prioridad a la casi todos los trabajadores del centro, vamos a presentar alegaciones a este punto", subraya Miguel Malla, secretario general del sindicato. 

Mayor atención a las necesidades educativas especiales

La DGA ha añadido un capítulo entero dedicado a los niños con necesidad específica de apoyo educativo. Entre los cambios que se producen destaca que el departamento de Educación podrá promover la escolarización anticipada al último año del Primer Ciclo de Educación Infantil, “a cuyos efectos dotará a estos centros con los medios personales y materiales pertinentes de manera que resulte gratuito”. Del mismo modo, se prevé que las ratios puedan bajar cuando haya “un porcentaje superior de alumnos con necesidad de apoyo educativo”.

Los próximos años se continuarán reservando 3 plazas de cada centro para este tipo de estudiantes. "Es una buena intención puesto que en los últimos tiempos solo se estaban dejando una", recuerdan desde FAPAR. No obstante, estas vacantes no se ofertarán en aquellos colegios en los que la matrícula de alumnos con necesidades de apoyo educativo sean demasiado elevadas, “poniendo en peligro la equilibrada distribución de dicho alumnado”. Esta medida se toma de acuerdo a las recomendaciones realizadas por el Justicia de Aragón.

Otras modificaciones

En el documento se pueden observar variaciones en otros ámbitos. “Estamos muy satisfechos porque se especifica que aquellas personas que cobrarán una renta básica obtienen automáticamente un punto adicional”, subrayan desde FAPAR. Anteriormente, solo podían acogerse a esta medida aquellas familias con ingresos iguales o inferiores al IPREM, mientras que, cuando se ponga en funcionamiento, también se añadirán a los que tengan asignada la renta básica, "sin necesidad de presentar ningún documento adicional". 

En el baremo para el acceso a la FP básica también hay puntualizaciones -cuando se publicó el anterior decreto no existía esta titulación-. Según especifica, si no haya suficientes plazas, se establecerá la “prelación del alumnado” según la edad del solicitante, su situación académica, sus posibilidades de continuación en el sistema educativo y la valoración de su expediente académico. En el resto de formaciones profesionales se sigue teniendo en cuenta la nota del expediente y la afinidad con las vías de acceso.

Documentos online

Otros cambios se centran en que los documentos para la escolarización ya no hay que llevarlos obligatoriamente a los Servicios Provinciales, ya que existe la opción de gestionarlo por vía telemática. “Otro ejemplo es que se ha eliminado el criterio de enfermedad crónica”, especifica Pardillos. Una decisión que critican desde FAPAR y que consideran que la DGA debería estudiar. "Se eliminó porque se podía hacer un uso indebido, por lo que pedimos que valoren de qué manera se puede volver a instaurar evitando las trampas", sostienen. Además, desde esta organización y los distintos sindicatos subrayan la participación y protagonismo que cobran las comisiones de garantías.

En el documento se especifican los cambios ya anunciados relativos a las ratios, con bajadas continuadas a lo largo de la próxima legislatura. Por el contrario, las zonas de escolarización se mantienen, aunque se especifica de manera más detallada todas las cuestiones relativas a la proximidad al centro.