El impuesto autonómico a los hidrocarburos encarece el litro de gasolina hasta 3 céntimos

El sector cree que se perderá competitividad y los clientes se quejan de que el aumento es "excesivo". Las estaciones de servicio tuvieron el día 31, la víspera de la subida, una gran afluencia de usuarios.

Los precios del carburante en la estación de servicio del paseo de la Mina que se cobraron ayer.
Los precios del carburante en la estación de servicio del paseo de la Mina que se cobraron ayer.
Oliver Duch

Entre dos y tres céntimos más por litro. La mayor parte de las gasolineras de Aragón estrenaron el año con subidas del precio del combustible por el efecto directo del nuevo impuesto autonómico a los hidrocarburos que acaba de aprobar la DGA y con el que quiere recaudar 18,9 millones de euros. Y la nueva situación suscitó tanto quejas como aglomeraciones el día 31 para, en la víspera de la subida, aprovechar unos precios más económicos.


0,029 euros más. Ese fue el efecto inmediato del impuesto en la estación de servicio del paseo de la Mina, donde José María Gálvez repostaba con cierto fastidio. "Es excesivo, se han pasado", decía. Elena, la dependienta, explicaba que el último día del año "vino muchísima gente para aprovechar". La imagen contrastaba con la de ayer, primer día del año, en el que las estaciones de servicio apenas tuvieron trasiego. En una gasolinera de la avenida de Cataluña, la repercusión en los precios era idéntica. Si el día 31 el litro de diésel estaba a 0,938 euros, ayer subió a 0,967."Si lo sé, vengo ayer"

Una trabajadora explicaba que la clientela se acercó masivamente el día 31 y expresó su enfado por la subida. "Es un poquito, pero se ha notado", afirmó. Los pocos que se acercaban a las gasolineras desconocían que hubiera aumentado el precio. "Si lo llego a saber vengo ayer. 2,45 céntimos es una barbaridad", explicó Julián de las Heras. También había clientes más comprensivos con los intereses recaudatorios del Gobierno de Aragón. "Ni me había dado cuenta. Tampoco ha subido mucho", afirmó Francisco José Jurado.


Aunque la mayoría de las estaciones de servicio repercutieron de inmediato sobre los precios la entrada en vigor del tributo, otras estaciones permanecieron igual. Por ejemplo, una de las más baratas de Aragón, la situada en el Alcampo de Valdefierro, mantuvo ayer los precios exactamente idénticos a los del día anterior. Otras gasolineras, como la del camino de las Torres, no habían repercutido los precios por estar cerradas el primer día del año.


Luis Serrano, gerente de la Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón (Aesar), explicaba que en estas fechas navideñas "no se pueden dar datos" representativos del impacto de la nueva imposición porque "el tráfico de estos días no es el normal y habitual, y consumimos más en todo". No obstante, vaticinó que ­a largo plazo previsiblemente se producirá una "importante repercusión por el efecto frontera", debido a que las comunidades limítrofes no aplican un recargo semejante y eso hará que haya quien decida repostar fuera de Aragón. "El sector lo va a notar, porque perdemos competitividad frente a otras comunidades, y además no se va a recaudar lo previsto por el Gobierno de Aragón, porque al consumirse menos combustible aquí se va a dejar de ingresar el IVA correspondiente", aclaró Serrano.


El gerente de Aesar indicó que, aunque de momento pueda percibirse poco impacto en el consumo porque "los precios están más bajos de lo normal" debido al pronunciado descenso del petróleo en los mercados internacionales, "en cinco o seis meses vamos a tener datos que, lamentablemente, nos darán la razón".

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