Tercer Milenio

En colaboración con ITA

La investigacion aragonesa, en una red europea para avanzar en Biomedicina

El ICMA y el INA han sido seleccionados para colaborar en este consorcio europeo sobre autofagia.

Dos institutos de investigación de la Universidad de Zaragoza y del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) participarán en un consorcio europeo para potenciar la transferencia de conocimiento en Autofagia, un proceso reparativo, que también está implicado en fenómenos de muerte celular, con el fin de acelerar posibles avances en los campos de la Biomedicina y biotecnología.


En concreto, el director del Instituto de Nanociencia de Aragón (INA), Ricardo Ibarra, y Clara Marquina y Jesús Martínez, del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (ICMA), instituto mixto del CSIC y la Universidad de Zaragoza, han sido seleccionados para colaborar en este consorcio, que servirá de plataforma para favorecer la colaboración e intercambio de conocimiento entre empresas, investigadores de varias disciplinas (nanociencia, bioinformática, física, química, biología y medicina), y otros agentes vinculados.


El proyecto prevé avances en el campo de la Biomedicina relacionados con la prevención, diagnóstico y terapia para varias patologías del cáncer y neurodegenerativas, así como mejorar la calidad de vida en relación a hábitos alimenticios y energías limpias.


Esta red europea en Investigación y transferencia de conocimiento sobre Autofagia, con aplicaciones en salud, agricultura y energía, estará liderada por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).


La autofagia es un mecanismo esencial para el mantenimiento de la regulación (homeostasis) a nivel celular y en los organismos en general. Controla el balance adecuado de nutrientes y elimina los elementos dañados o sobrantes del interior de la célula, las proteínas degradadas e incluso, microorganismos invasores.


En cuanto a la salud de las personas, se trata de un mecanismo de gran importancia terapéutica, con potencial para combatir el cáncer, el lupus eritematoso o la neurodegeneración, entre otros. También se ha demostrado que desempeña un papel esencial en la lucha contra el envejecimiento de los tejidos.


En el ámbito biotecnológico, la modulación de la autofagia ha mostrado aplicaciones para la optimización de la producción agrícola y para obtener fuentes de energía alternativas a partir de microalgas.


La red Transautophagy organizará talleres y congresos para fomentar la investigación colaborativa y multidisciplinar, promoviendo la creación de vínculos entre los diferentes participantes y sobre todo con las empresas que también participan como por ejemplo Anaxomics, Prous Instituto, Vivía Biotech, entre otras.


El equipo europeo potenciará la innovación como herramienta para la resolución creativa de problemas, ofreciendo oportunidades para investigadores jóvenes y fomentando la igualdad de género. El consorcio también acelerará la transferencia del conocimiento generado en productos y procesos para su utilización en los campos de la biomedicina y biotecnología.


Este consorcio también prevé la divulgación y transferencia de los resultados a la sociedad, que irán desde recomendaciones para un envejecimiento saludable o para la prevención de enfermedades, hasta el descubrimiento de nuevas terapias o el desarrollo de biocomponentes o nanodispositivos para modular la autofagia de manera selectiva.


Los resultados podrán tener aplicaciones clínicas, como en el desarrollo de agentes antitumorales, o neuroprotectores, por ejemplo, así como aplicaciones para el aprovechamiento de plantas y microorganismos para cultivos eficientes y como fuente alternativa de energía.


Las redes COST (European Cooperation in Science and Technology) de la Unión Europea fomentan la creación de redes internacionales de investigación a partir de proyectos con financiación nacional, con una

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión