La primera comparecencia para dar cuenta de los presupuestos acabó con un aluvión de duras críticas al consejero de Hacienda,Fernando Gimeno, por parte de los grupos de la oposición, que pusieron de relieve "la irrealidad" de las cuentas y los recortes que se avecinan. Pero hubo un rifirrafe que tensó en especial el debate, cuando el PP puso de relieve el tijeretazo a las comarcas. Gimeno replicó con dureza, consciente de que en los consejos comarcales crecía la preocupación y el malestar por los recortes, incluso entre los controlados por el PSOE.

De hecho, Javier Lambán ha convocado hoy a los responsables de las 23 comarcas socialistas para rebajar su "preocupación", compartida con los presidentes de otros colores políticos. "Cualquier recorte será a costa de los servicios, a los que dedicamos casi la mitad del presupuesto", advirtió Felisa Salvador, de la Ribera Baja. "Estamos en mínimos y no se puede estirar más el dinero. Es imposible prestar los servicios y volveremos a las lista de espera", avisó.

Lourdes Arruebo, presidenta del Alto Gállego, reconoció que hay "inquietud" en las comarcas de Huesca. A la espera de la tramitación parlamentaria, han transmitido al PSOE la difícil situación en la que quedarían estas administraciones, que en el Alto Aragón también se encargan de la protección civil y la extinción de incendios. Deseó que la DGA "cambie" su postura.

Su homólogo del Aranda, José Ángel Calvo, también confió en que al final el recorte "no sea tan exagerado" y coincidió en resaltar que casi todos sus ingresos proceden de las transferencias del Gobierno de Aragón, por lo que "la responsabilidad sería suya". Alberto Val, del PP y presidente de la Comarca de Tarazona y el Moncayo, se preguntó "cómo mantener" los servicios sociales que prestan con un tercio menos de fondos. "Si ya no llega casi para cubrir las nóminas, que nos digan la fórmula", dijo.

En las Cortes, el diputado del PP Antonio Suárez afirmó que el PSOE-CHA "se carga" la política territorial con un hachazo del 46% (32 millones). Frente al aumento de 8,3 millones en el Fondo de Cooperación Municipal, puso como ejemplo la desaparición del de Desarrollo Territorial y Rural (15 millones), la supresión de 2,7 millones para la mejora de carreteras o una partida de 1,5 millones para promoción de empleo en el medio rural. A esto se suma el recorte de 22,5 millones a las administraciones comarcales. Suárez insistió en que el 34% del gasto de las comarcas es social. "Estos presupuestos no son ni reales ni sociales", dijo.

Gimeno replicó enfadado que, cuando gobernaba el PP, se engordaban las cifras de las comarcas, por ejemplo con 16 millones de los fondos Feader o con 6 de las escuelas infantiles. Y defendió la supresión del Fondo de Política Territorial (9,6 millones), del que dijo que se "distribuía por no se sabe quién", afirmación que Suárez tachó de "calumniosa". Al margen de la polémica, negó el recorte inversor y dijo que el presupuesto del PP era un "caos" y un "revoltijo". Se aferró a la herencia y subrayó que el déficit de 2014 era del 1,81% del PIB, frente 1,6% que se anunció.

Marta de Santos (Podemos)expresó el deseo de su partido de ser "constructivo", pero calificó los presupuestos de "apáticos". Elena Allué (PAR) atacó la infradotación del gasto corriente, el "maquillaje" de las cuentas y el recorte de la inversión productivo. Javier Martínez, de Ciudadanos, afirmó que se dejan piezas sin colocar, como la renta básica o la ley de capitalidad, y calificó el presupuesto de "temerario".