San Gregorio se transforma por unas horas en Normandía
El domingo empezó una batalla de cinco días en el campo de maniobras. Mañana se celebrará la gran demostración con el salto de 500 paracaidistas norteamericanos.
Aunque la Alianza Atlántica tiene fijada la fecha de mañana como el punto final de la gran demostración de las maniobras Trident Juncture, el comandante Andrés Iglesias, de la Brigada Aerotransportable (Brilat) Galicia VII, precisa que esa batalla va a durar cinco días, desde el domingo hasta la noche del jueves, la víspera de la despedida.
Pero la llegada del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ex primer ministro noruego (2005-2013) y líder del Partido de los Trabajadores de Noruega hasta hace un año, supondrá que se interrumpa la contienda con fuego real y se utilizará humo. Podrán ver los tanques Leopard y Abrahms, de procedencia alemana y norteamericana, respectivamente, como la mayoría de los militares llegados a Zaragoza: 1.500 germanos y 1.600 de Estados Unidos (aunque muchos están destinados en Alemania).
Al secretario general lo acompañarán de 400 representantes de los 28 países aliados y de otros ocho invitados como observadores, que van a llenar varios hoteles en la capital aragonesa, como confirmaron a este diario algunos de los beneficiados.
La exhibición convertirá a San Gregorio en Normandía durará una hora para las cámaras de televisión y medios de comunicación. Se han acreditado ese día 250 periodistas de varios países. Participarán 1.800 soldados con un entrenamiento aéreo, entre los paracaidistas de la 82 División Aerotransportada y de la española Brilat, con militares de doce países aliados participantes.
El general Andrés Chapa, jefe de la Brigada de Caballería Castillejos II, explica que miembros de su unidad hacen de enemigos en la supuesta batalla. "Sin avisar se encuentran (las tropas aliadas) con el ataque de un terrorista, se cruzan con una manifestación o reciben un ataque convencional para que reaccionen", apunta el general Chapa.
La demostración incluye elementos por aire y tierra, entre la Base Aérea de Zaragoza y el campo de San Gregorio, en una ofensiva integrada con numerosos helicópteros, tanques y un significativo equipo de combate de infantería por tierra.
La OTAN examina a las tropas para poder crear la Fuerza de Muy Alta Disponibilidad (VJTF), integrada por una brigada multinacional de cinco batallones de maniobra, formada a partir del núcleo principal de fuerzas aportado por cada país que la lidere, al que se sumarán efectivos de otras naciones aliadas. El núcleo de esa fuerza es la Brigada Aerotransportable Brilat, que tiene que aprobar en 2016 su examen final o certificación para estar lista y desplegarse si llega el caso. Las amenazas en Ucrania, Siria, con el Estado Islámico, o el yihadismo del Sahel, en África, aceleraron la puesta en marcha de esta nueva forma de defensa. Y en ese escenario post-Afganistán, San Gregorio es como Normandía.