Casi el 50% de los médicos aragoneses se van a otra comunidad a hacer la residencia

Una vez terminados los estudios de medicina, los estudiantes comienzan su etapa como residentes, pero para ello, antes deben superar el examen que les dará la nota necesaria para poder elegir la especialidad y el hospital que mejor se adapte a sus necesidades. Ante esta situación, el 47,4% de los aragoneses deben irse a otra comunidad autónoma para llevar a cabo sus cuatro o cinco años de residencia -todo depende de la especialidad, de hecho, algunas solo necesitan tres años-.

"Las buenas notas que consiguen los alumnos de la Universidad de Zaragoza provocan que sea una de las comunidades en las que menos médicos se tengan que marchar para seguir con su formación", especifica Fernando Gutiérrez, vocal de Médicos en Formación del Colegio de Médicos de Zaragoza. No hay que olvidar que son los mejores expedientes los que primero eligen plaza y, por lo tanto, para hacer esta distribución, no se valora la cercanía geográfica. 

Sin embargo, existen otras razones que explican que casi el 50% de los aragoneses se vayan a otra comunidad a cursar el MIR -Médico Interno Residente-. Según subraya el presidente autonómico de Sanidad de CSIF Aragón, Evangelio Navarro, las "escasas" plazas con las que cuenta la comunidad aragonesa afectan sobre esta decisión.

En concreto, este año el Gobierno central ofertó 191 plazas -el año pasado se titularon casi 260 universitarios- entre los diferentes centros de salud y hospitales de Aragón. “Al no haber un gran número de vacantes, aunque los aragoneses obtienen buenos resultados, es complicado conseguir la plaza de la especialidad que desean en la comunidad”, especifica.

No obstante, desde el Colegio de Médicos de Zaragoza señalan el número de plazas está en concordancia con las necesidades laborales de los centros aragoneses. "Si hubiera más plazas, habría más opciones para los médicos de Aragón, pero después de la residencia casi ninguno continuaría en el puesto", recalca Fernando Gutiérrez, vocal de Médicos en Formación del Colegio de Médicos de Zaragoza. 

Otra de las razones que señala Navarro es “la búsqueda de un centro hospitalario con determinadas características o una forma concreta de trabajar”. Una opinión que comparte Gutiérrez. "Hay gente que prioriza un centro concreto, especialmente, en Madrid o Barcelona porque tienen técnicas más pioneras, aunque después no tiene muchas opciones laborales", asegura. 

Por su parte, Navarro destaca que la falta de médicos en Aragón provoca que los residentes tengan mayor carga de trabajo, “lo que les impide realizar cursos complementarios o investigación”. “Por esta razón, algunos prefieren probar en otras comunidades, en las que pueden tener menor carga laboral”, especifica.

Cada año, el Ministerio de Sanidad realiza un informe sobre las preferencias de los MIR, sus notas y su elección, sin embargo, esta es la primera vez que ofrece datos detallados de movilidad entre las comunidades autónomas. De hecho, según se muestra en el estudio, Aragón es la cuarta comunidad que tiene un menor porcentaje de médicos que se van fuera a cursar la especialidad. 

La media española se sitúa en que el 54,8% de los españoles cambian de lugar de residencia al seleccionar la plaza de residente. Estas cifras varían entre el País Vasco, donde solo el 35,6% se va de la comunidad, a La Rioja, cuyo porcentaje asciende hasta el 90,9%. No obstante, ante la falta de plazas o de nota para ocuparlas, la mayoría de los alumnos deciden buscar destinos cercanos a su lugar de residencia.

¿Cuál es la especialidad más demandada?

Según el informe, Dermatología, Cirugía Plástica, Cardiología, Neurocirugía y Cirugía Pediátrica fueron las especialidades más demandadas el último año. Por el contrario, Análisis Clínicos, Medicina del Trabajo, Farmacología clínica, Microbiología e Inmunología son las que tienen un menor interés en los futuros especialistas.

“En muchas ocasiones, los egresados se guían por sus gustos, pero en otros casos, optan por la decisión que tiene más salidas laborales”, subraya Navarro. Por eso, justifica que Medicina Familiar y Comunitaria se encuentre entre las que más interesan, pero no esté entre las más demandadas. “Es muy amplio el número de profesionales de este sector, pero hay menos contrataciones porque, debido a la política de productividad variable, en atención primaria se autocubren por otros médicos los 25 primeros días de ausencia”, subraya.

Desde el Colegio de Médicos de Zaragoza también señalan que las oportunidades laborales en Medicina Familiar y Comunitaria son escasas en Aragón. "En los hospitales es imposible, mientras que en la sanidad rural sí que hay alguna plaza", puntualizan. Por el contrario, Oftalmología y Cirugía Plástica son algunas de las que más futuro laboral tienen. "En los dos últimos años, los MIR de Cirugía Plástica del Hospital Miguel Servet -entra uno cada año- han conservado la plaza", ejemplifica Gutiérrez.