Los médicos pedirán a Celaya reforzar Atención Primaria tras años de recortes sanitarios

El gasto sanitario aragonés es el segundo que más ha caído en el país -un 19,2%-, según Funcas.

Un médico examinando a un paciente en el centro de Atención Primaria de La Milagrosa
Un médico examinando a un paciente en el centro de Atención Primaria de La Milagrosa
Mariano Castejón

Los profesionales del sector sanitario en Aragón coinciden en señalar la Atención Primaria como la principal afectada por los rectores presupuestarios de los últimos años de crisis. De ahí que, ante la llegada de un nuevo Gobierno autonómico, centren sus reivindicaciones en reforzar este área asistencial.


Así se lo harán saber desde el sindicato de médicos Fasamet, en la reunión que tienen concertada con el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, para la próxima semana, en las que escucharán los planes del Departamento en esta legislatura.


“El porcentaje de gasto en Atención Primaria se ha visto disminuido en los últimos años”, explica Leandro Catalán, presidente de este colectivo médico, quien recuerda que se ha ido compensando con la “sobrecarga de trabajo” de los profesionales, lo que ha repercutido en el paciente. Por ello, asegura que “no estamos dispuestos a más reducciones de plantilla”.


Según un reciente informe de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), Aragón es junto a Castilla-La Mancha la comunidad que mayor tijeretazo ha aplicado al presupuesto sanitario en todo el país, con una reducción de más de 300 millones de euros (-19,2%).


Esta semana se conocía el testimonio del jefe del servicio de cirugía cardiovascular del hospital Vall d'Hebron de Barcelona, que denunciaba el fallecimiento de dos pacientes como consecuencia directa de los recortes en la sanidad pública. Un extremo que no se ha dado en la comunidad aragonesa, pero que pone de manifiesto la precariedad del sector.


Entre los capítulos presupuestarios que más se han modificado a la baja en Aragón en los últimos años, según denunció Comisiones Obreras, destacan los gastos corrientes en bienes y servicios – que en Aragón incluye, entre otros, los gastos que originan los conciertos con la Sanidad privada, gastos en material de oficina y conservación y reparación de enseres – y los gastos de personal.


Para Carmen Valencia, de Marea Blanca Aragón, “la Atención Primaria ha sido la mayor pagana” de estos recortes, con retrasos en las citas para el médico de cabecera, y una consecuente “saturación de los servicios de urgencias”.


Además, recuerda los problemas de abastecimiento de material sufridos en los últimos años en hospitales, donde también “se han perdido camas y, sobre todo, personal”, así como los “expolios” de centros como el Grande Covián.


En cualquier caso, confían en que lo peor haya pasado. “Parece que la nueva Consejería tiene intención de mejorar las partidas presupuestarios, pero habrá que ver si se concreta”, concluye Valencia.

Plan de jubilaciones forzosas

Por otro lado, los sindicatos médicos esperan recibir una explicación sobre las intenciones del consejero Celaya tras su decisión de no recurrir la sentencia del TSJA sobre el plan de jubilaciones forzosas puesto en marcha por el anterior Ejecutivo autonómico.


El pasado mes de julio el Tribunal emitió una sentencia por la que se anulaba el Plan de Ordenación de Recursos Humanos del Salud al entender que este programa no era global y que regulaba solo el aspecto de la jubilación de los médicos a los 65 años.


Celaya recordó que la sentencia no obliga a readmitir a los médicos. A su juicio, el plan no era correcto, "lo que no quiere decir que las jubilaciones estuvieran mal hechas".

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