Desciende un 10% el número de alumnos erasmus en la Universidad de Zaragoza

A pesar de la creciente necesidad de conocer otro idioma y formarse en el extranjero, el pasado curso han salido fuera menos estudiantes aragoneses. Y, del mismo modo, también ha caído el número de extranjeros que viajan a Zaragoza para participar en el programa Erasmus. La bajada ha sido mucho más acusada en el primer caso, y es de aproximadamente el 10%, entre otros motivos, por el cambio en las ayudas que se conceden para los gastos adicionales derivados de la movilidad de los estudiantes, y que en ningún caso se destinan a sufragar todos los costes en la universidad de acogida.

En el curso 2014-2015 se puso en marcha la nueva etapa del tan famoso como demandado programa, denominado ahora Erasmus Plus y, con él, se establecieron nuevos criterios y cambios en la burocracia necesaria que, según apuntan desde el vicerrectorado de Relaciones Internacionales, provocó una incertidumbre inicial que echó para atrás a algunos alumnos que pensaban solicitar una estancia en el extranjero. Incluso hubo personas que ya habían pedido las becas que se echaron atrás.

De esta manera, la institución aragonesa ha pasado de enviar 921 alumnos a diversas universidades extranjeras en el curso 2013-2014 a 836 el pasado año. La cifra también cae en lo que se refiere a erasmus extranjeros que optan por Zaragoza para completar sus estudios. Entre 2010 y 2011, la cifra se mantenía por encima de las 700 personas, cuando el curso 2014-2015 bajó a 676. Por facultades, Ingeniería y Arquitectura (con 206) y Filosofía y Letras (con 112) son las que más universitarios envían al extranjero, sin embargo, es esta última facultad la que más estudiantes recibe de fuera (el pasado año, un total de 224).

Según explica Regina Lázaro, vicerrectora de Relaciones Internacionales, lo máximo que han permitido financiar en España los erasmus ha sido cinco meses. "Además –subraya–, el dinero se recibe tarde, una vez que el alumno ya se ha ido, por lo que debe tener la capacidad económica para salir adelante". Aunque esta situación cambiará al año que viene, el centro aún no ha recibido instrucciones de cuáles serán los nuevos criterios.

Cualquier estudiante erasmus español, por el hecho de ser seleccionado, tiene acceso a una ayuda, que otorga el Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (Sepie) y que puede ser de 200, 250 o 300 euros, según la calidad de vida del país de destino. A esta cantidad, se le pueden añadir 100 € suplementarios si consiguen las becas erasmus.es, que concede el Ministerio de Educación a aquellos que acreditan un nivel B2 en el idioma del país en el que van a cursar sus estudios. A estas cantidades, los alumnos de la Universidad de Zaragoza pueden solicitar otra, del Gobierno de Aragón o de Ibercaja, según sea su situación. El ejecutivo autonómico ofrece ayudas complementarias a los alumnos con menos recursos, si cumplen una serie de requisitos. Por su parte, el banco aragonés otorga becas por excelencia académica, que también se suman a las ayudas del Sepie o, en su caso, del Ministerio.