La cadena de supermercados que preside Juan Roig anunció en un comunicado que tanto Mercadona como sus interproveedores lácteos (Iparlat, Lactiber, Covap, Entrepinares, Quesería Lafuente, Postres Lácteos Romar y Schreiber), así como otros proveedores que envasan bajo la marca Hacendado, ya están analizando cada uno de los acuerdos que mantienen con los más de 3.100 ganaderos con el "compromiso de aplicar los incrementos pertinentes en cada caso que se considere necesario" y que pueden suponer hasta un máximo de dos céntimos de euros por litro de leche.

La medida, detalló la firma valenciana, irá dirigida principalmente a "aquellas zonas que están sufriendo más directamente la difícil coyuntura actual en la que se encuentra el sector lácteo" y será efectiva a partir de las liquidaciones del presente mes de septiembre. El incremento de costes no se trasladará al precio final que pagan los clientes en las tiendas, señalaron desde Mercadona.

La industria también está reconsiderando sus contratos a la baja. Al menos así lo comunicaron ayer a la agrupación gallega de cooperativas (Agaca) los responsables de compra de Leche Celta y de Capsa (cuya accionista mayoritario es Central Lechera Asturiana) que manifestaron su intención de "invalidar la propuesta de contratos a la baja para los próximos meses".

Desde ambas industrias se lanzó además un aviso a navegantes al insistir que la decisión "es un punto de partida suficiente" para retirar los tractores que todavía bloquean las entrada de las factorías lácteas de la comunidad gallega.