¡Paren a este fenómeno que fue del CAI!
Antetokounmpo, que fue fichado por Willy Villar tras ver un impactante vídeo, es hoy una estrella en ciernes en la NBA y un fijo en el 5 inicial de Grecia, rival mañana de España.
Una rotación en la que ha irrumpido como un cohete Giannis Antetokounmpo, un portento de 20 años que perteneció al CAI durante nueve meses (desde octubre de 2012 a junio de 2013), pero que nunca tuvo la oportunidad de deslumbrar a la afición aragonesa. La NBA, siempre atenta a los proyectos de estrella en Europa, se cruzó en el camino, previo pago por parte de los Milwaukee Bucks de la cláusula de rescisión. Un negocio rotundo en lo económico, pero que deja un regusto amargo por lo que pudo ser y no fue.
Antetokounmpo es apodado en Estados Unidos como The Greek Freak (el fenómeno griego). No se trata de un halago gratuito. Con sus 2,11 metros de altura, una capacidad de salto vertical de 3,7 metros y unas manos infinitas, su adaptación ha sido sorprendentemente meteórica. La progresión que ha firmado en sus dos campañas en la mejor liga del planeta anuncia una sólida carrera en la aristocracia de la competición. Los analistas incluso le auguran futuras participaciones en el All Star. Hasta el momento, ya se ha erigido en uno de los factores principales en el resurgir de unos Bucks que la pasada temporada regresaron a los play offs.
Los dos millones de dólares que percibirá el próximo ejercicio y los 4,1 millones en el último año de su contrato son el premio a toda una vida de penurias y de abnegado trabajo contra el destino. Sus padres, nacidos en Nigeria, emigraron de forma ilegal a Grecia. Padecieron los sufrimientos que van adosados a cualquier sin papeles. El propio Giannis, junto a sus tres hermanos, contribuía a la subsistencia de la familia vendiendo pañuelos en las calles helenas. Hoy, todos se han instalado en Milwaukee y han desterrado las estrecheces de antaño. Su situación podría ser todavía más boyante en el verano de 2018, cuando Antetokounmpo se librará de su restringido salario de rookie (debutante) y saldrá al mercado libre. De no mediar una lesión, sus ingresos se multiplicarán notablemente.
Si radiante es su presente en los Bucks, no le va a la zaga su influencia creciente en la selección griega. Se estrenó en un gran torneo internacional con el Mundial de España 2014 y, un año después, disfruta de los galones de titular en el Eurobasket. El técnico Fotis Katsikaris le ha incrustado en el cinco inicial en los seis encuentros y seis victorias disputados. Su rendimiento transita en un in crescendo. En los dos últimos choques contra Holanda y contra Bélgica en octavos de final ha cocinado sendos dobles dobles en puntos y rebotes. España es su siguiente obstáculo.
Esta vorágine de laurel y gloria no ha cogido desprevenido a Willy Villar. El director deportivo del CAI ya vio venir esta tormenta cuando en 2012 cayó en sus manos un vídeo casero de Antetokounmpo en la liga júnior griega. El impacto de aquellas imágenes fue tan devastador que el canario se trasladó al pabellón del Filathlitikos de la segunda división helena para cerciorarse de la certeza de aquel prodigio, que no era producto de su imaginación o de una manipulación. Le sometieron al examen de dos entrenamientos y la excitación se disparó. Y un partido, en el que anotó 44 puntos y atrapó ocho rebotes, aniquiló la más mínima reticencia de Villar. "Me temblaron los pies ante lo que vi. Llamé directamente al presidente para decirle que teníamos que fichar a aquel portento", reconoció el ejecutivo. El añorado José Luis Abós también tuvo el privilegio de calibrar in situ al adolescente.
En octubre de 2012 Antetokounmpo estampó su rúbrica en un vínculo por cuatro campañas con el CAI. En junio de 2013 fue seleccionado en el Draft por los Bucks. Un mes después ya formaba parte del plantel de la franquicia de Wisconsin.
"La historia de Giannis es increíble. Y lo mejor está por llegar", advierte Villar.
