El Gobierno central ignora el veto de Navarra y aumenta en 7 millones la inversión para Yesa
El Congreso aprobará una enmienda del PP para aumentar su ritmo en 2016. La DGA defiende la obra "sin titubeos".
Además, el presidente de Aragón, Javier Lambán, se sumó ayer al apoyo expreso al recrecimiento de Yesa y se desmarcó de su homóloga navarra. Lambán garantizó que la DGA va a seguir defendiendo "sin titubeos y sin ninguna clase de duda" las obras de recrecimiento.
El aumento de presupuesto para Yesa en 2016 se va a producir a través de dos enmiendas a los Presupuestos del Estado, registradas por el grupo del PP en el Congreso. Los populares justifican ante el Legislativo sus enmiendas (una es de 4 millones extra y otra de 3 millones) en que ese dinero es necesario "para mantener el desarrollo de la obra conforme a sus ritmos actuales de ejecución".
El PSOE, por su parte, también ha presentado una enmienda parcial sobre Yesa, en este caso de 25 millones de euros, que se tramitará a lo largo de este mes.
Por ello, Celma insistió en que Lambán lidere "con determinación" la defensa del interés general frente el Gobierno navarro. Además, a Celma le llamó la atención el hecho de que la ejecución de las obras del Pacto del Agua "no figure" en ninguno de los puntos de acuerdo suscritos por el PSOE con las formaciones que propiciaron la investidura de Lambán.
Desde el PSOE, su portavoz parlamentario, Javier Sada, se desmarcó de las pretensiones del Gobierno de Barkos e insistió en que Yesa es una obra "fundamental para Aragón". En lugar de referirse a la posición del Ejecutivo navarro, Sada prefirió cargar contra el actual Gobierno central, al que acusó de "ir muy despacio" con la obra: "Nos juraron que estaría lista en 2015 y ahora ya vamos camino de 2019 o 2020 en los planes", afirmó.
El PAR se manifestó en la misma línea que los socialistas. El presidente de los aragonesistas, Arturo Aliaga, no se explica los retrasos y las dudas que todavía genera una obra "en marcha, fruto de un proceso democrático de participación colectiva, en un Estado de derecho y con gobiernos de todo color político". Reiteró que Yesa "no es competencia" del Gobierno navarro y se reafirmó en la legalidad y la necesidad de la obra.
Según este diputado, "las soluciones que inicialmente se plantearon para satisfacer las necesidades de política hidráulica de dicha zona han sufrido una lógica evolución según nuevas consideraciones ambientales y sociales"; por ello, su grupo "aconseja al gestor público tener en cuenta otras soluciones posibles" que podrían ser "más eficientes".
Podemos, por su parte, "defiende el mismo enfoque de política hidráulica en Navarra y en Aragón, mientras que el equipo de gobierno de la DGA es incapaz de tener una postura unitaria sobre Yesa", expresó el diputado violeta Nacho Escartín; CHA explicitó su discrepancia con su socio en el Pignatelli asegurando que mantiene su tradicional rechazo a Yesa; e IU, por último, reivindica ante todo "garantizar la seguridad" de la obra.