El último es un hombre de 43 años procedente de San Sebastián, que sufrió un accidente la tarde del martes en el término municipal de Torla-Ordesa. Francisco Javier Itulain Olea practicaba senderismo con su pareja por una ruta que se inicia en Casa Oliván y sube por las clavijas de Carriata hasta la Faja de las Flores. No tuvieron problemas a la ida, pero a la vuelta, cuando tenían que volver a cruzar por las clavijas, intentaron evitarlas rodeándolas para tomar un paso alternativo. Fue entonces cuando el hombre resbaló y se precipitó 50 metros.

El aviso lo dio su pareja sobre las siete y media de la tarde. La Guardia Civil activó un operativo formado por el helicóptero de rescate con base en Benasque, un médico del 061 y el Greim de Boltaña. Poco pudieron hacer por salvar su vida, ya que al llegar comprobaron que ya había fallecido. Sí hubo que atender a la mujer, que lógicamente estaba muy alterada.

"Fue un rescate complicado porque se hizo de noche y el helicóptero tuvo que volar sin luz. El piloto valoró esperar un poco para poder sacarlos de allí en ese momento, a pesar de que eran condiciones más difíciles que de día", explicó el teniente Darío Álvarez de la Cal, jefe de las unidades de rescate de la provincia . La tecnología del aparato no impide trabajar de noche, pero la falta de visibilidad aumenta el riesgo de encontrar obstáculos como cables eléctricos. El rescate finalizó casi a las once de la noche.

La Faja de las Flores es una de las rutas clásicas de senderismo de Ordesa, un balcón de 3 kilómetros que discurre por la parte alta del valle ofreciendo una bella panorámica. Pese a ser muy frecuentada, no está considerada una de las excursiones más fáciles, dado el desnivel y la presencia de clavijas donde apoyar manos y pies para superar la pared vertical.

La pareja donostiarra las utilizó para subir, pero prefirió no bajarlas a la hora del regreso (no llevaban cuerdas para sujetarse) y buscar una senda alternativa más segura. La fatalidad quiso que él perdiera aquí la vida. "Es una ruta que hace mucha gente, no hay una dificultad extrema pero es un paso más técnico", aclaró Álvarez.

Ese mismo día, hubo otros tres rescates, con dos personas heridas en sendos incidentes ocurridos en un barranco de Fanlo, también en el Parque Nacional de Ordesa, y dos excursionistas evacuados en Benasque, desorientados y con agotamiento.

En cuanto al número de accidentes, las cifras de este verano son similares al año pasado, "pero sí ha habido un aumento importante de los fallecidos", aseguró el teniente. Desdel el 1 de julio, se han registrado 11 víctimas, frente a las siete de los dos meses del año pasado. Especialmente trágico está siendo este agosto, que todavía no ha acabado, al contabilizarse ya ocho muertos.

En opinión del jefe de las unidades de rescate de la Guardia Civil, ninguna causa en concreto puede explicarlo, aunque sí es cierto que algunas muertes están directamente relacionadas con las tormentas y el aumento de caudal en los barrancos.