Ante sí tiene el reto de marcar un hito en la historia del bádminton español y mundial ya que únicamente tres mujeres, de origen chino, han conseguido doblete: Li Linweng (1983 y 1989), Han Aiping (1985 y 1987) y Xie Xingfang (2005 y 2006).

En un alarde de táctica, técnica, concentración y deseo de triunfo, la onubense compaginó con su rival errores no forzados en la primera manga que dejaban un inicio muy abierto. Mientras que Sung apostaba por el juego en la red, Carolina buscaba el fondo de la pista. La constancia hizo que la española golpeara de forma definitiva con un buen final de set que la puso por delante.

Salió más enchufada Sung en el segundo set y controló a una Carolina Marín desquiciada con los árbitros. Consiguió una importante ventaja inicial (1-7) que le sirvió para no pasar apuros tras la reacción de la española. La agresividad en el juego de la andaluza le permitió, incluso, ponerse por delante (14-12), pero la eficiencia de la coreana fue suficiente para ganar (15-21) y forzar una tercera manga.

A Sung la aparecieron los fantasmas. Marín potenció su cansancio y la desgastó con la máxima de deslucir su juego. A pesar de necesitar la entrada de las asistencias médicas tras una caída, forzó hasta el máximo llevando al extremo a la onubense con un 8-13. Reaccionó Carolina y marcó un punto de inflexión con un parcial de 10-0 a su favor para martillear las esperanzas de la asiática. La diferencia física cayó hacia el lado español para que se hiciera con una victoria (21-16) que le permite acudir a su segunda final consecutiva.

De esta manera, la número uno del mundo defenderá el título logrado el año pasado en Dinamarca y se enfrentará en el duelo por el oro a la india Saina Newhal, que se deshizo de la indonesia Lindaweni Fanetri en la semifinal. La asiática ha ganado tres de sus cuatro enfrentamientos anteriores entre ambas, pero la Carolina sabe lo que tiene hacer. Si supera su carga emocional y mantiene la concentración sus golpes podrá romper una nueva barrera en su carrera de hitos.