Las oportunidades para defender el trabajo fin de grado varían de una Facultad a otra

En Medicina solo se puede presentar en junio y septiembre, y en Ingeniería hay hasta 6 variables.

Medicina continúa siendo el grado con mayor nota de corte, un 12,547 en Zaragoza
Las oportunidades para defender el trabajo fin de grado varían de una Facultad a otra
ASIER ALCORTA

La llegada del plan Bolonia supuso la implantación del trabajo fin de grado (TFG) en todas las titulaciones. En esta asignatura de 12 créditos se debe realizar un trabajo académico específico, como producto de las prácticas en empresas, del análisis en laboratorio o de una estancia en otra Universidad. Ante esta diversidad de opciones, la Universidad de Zaragoza estipuló que cada Facultad tenía la potestad para determinar el número de ocasiones entre las que un alumno podría elegir cuándo presentar el TFG.


Esto quiere decir que un alumno puede tener, por ejemplo, 4 periodos de defensa (junio, septiembre, diciembre y febrero), por lo que tendrá que elegir cuál se adapta más a sus necesidades para presentar el trabajo. Sin embargo, si suspende, solo podrá presentarse a una de las opciones que le queden durante ese curso académico. El único requisito que marca la Universidad es que existan esas dos convocatorias mínimas.


De este modo, mientras que los futuros médicos solo tienen la opción de presentar el TFG en junio y septiembre; los ingenieros pueden adecuar su ritmo de trabajo a alguna de las seis “bandas de defensa” que ofrece la Escuela de Ingeniería y Arquitectura (EINA). “A partir de nuestros años de experiencia con los proyectos final de carrera, hemos comprobado que la mejor opción es darle al alumno las máximas opciones”, señala José Ángel Castellanos, decano de la EINA.


En su opinión, el TFG no es una asignatura más, por lo que el tiempo de preparación que se necesita es mayor y puede variar por muchas razones. “Uno puede hacer un trabajo académico durante el segundo semestre y presentarlo en junio y otro alumno puede estar en una empresa durante el verano, preparar el trabajo en otoño y presentarlo en diciembre”, señala.


Sus 6 periodos de defensa están divididos en mayo, junio, septiembre (primera y segunda quincena), diciembre y febrero. “De todos ellos, los más demandados son los de septiembre, bien porque tienen alguna asignatura suspendida o porque prefieren redactar el trabajo con tranquilidad a lo largo del verano”, recalca. De este modo, intentan buscar la mayor versatilidad para sus alumnos. “Si uno lo presenta en diciembre o febrero puede apuntarse al segundo semestre de la gran mayoría de los másteres que ofertamos y así no pierde un año entero”, subraya.


Eso sí, la facultad que mayor versatilidad ofrece es la Politécnica de Huesca. En esta ocasión, un estudiante puede presentar el TFG en cualquier mes del año, excepto en agosto. En el lugar opuesto se encuentran los estudiantes de Medicina que solo tienen las dos opciones mínimas fijadas por la Universidad de Zaragoza. “No se necesitan más puesto que la gran mayoría de los alumnos lo presentan en junio y no queda casi ninguno para septiembre”, sostienen desde la Secretaría del centro.


Los estudiantes de la Facultad de Economía y Empresa han visto reducir el número de “convocatorias” este año, ante la crítica de las asociaciones estudiantiles. “El año anterior hubo 4 periodos porque se instauró la posibilidad de presentarse al TFG con hasta 12 créditos suspendidos, pero hemos decidido volver a los 3 (febrero, junio y septiembre) ya que son los necesarios”, explica José Mariano Moneva, decano de la facultad. Según señala, casi todos los depósitos se realizan en junio, “por lo que no es práctico que haya una convocatoria en diciembre”.


La gran mayoría tienen una oferta que ronda las 3 y 4 “convocatorias”. En el primer caso se encuentran la Facultad de Economía, la de Derecho y otras de Huesca como la de Ciencias Humanas. Por su parte, Veterinaria, Ciencias, Filosofía y Letras, Ciencias Sociales y de la Salud ofrecen hasta 4 posibilidades a sus alumnos.


En las diferentes facultades consultadas señalan que son escasos los casos en los que un alumno suspende el TFG y tiene que volver al presentarlo. Por ello, en muchas de ellas ponen un número más elevado de opciones para que el estudiante pueda decidir el momento en el que está más preparado para presentar ese trabajo sin perder un año académico entero.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión