La gerente de la Fundación, Rosa López Juderías, señaló que cuando se concibió el Mausoleo "probablemente no se creyó que fuese a atraer a tantas personas". De hecho, este año hemos vuelto a los niveles de visitantes de 2014, uno de los mejores de la historia del monumento.

Rosa López lamentó que por falta de espacio no puedan ser expuestos los objetos que son donados anualmente tanto por particulares como por instituciones. Entre ellos, destacan los fondos documentales sobre Los Amantes depositados en el Museo Provincial, o una escultura de piedra y forja de Isabel y Diego realizada por el escultor José Gonzalvo que también se encuentra en ese mismo lugar. El Centro de Iniciativas Turísticas de Teruel, CIT, cedió hace poco a la Fundación una pintura que permanece por el momento almacenada en las instalaciones del edificio.

La reciente adquisición de un solar en la calle Matías Abad, contiguo al Mausoleo, permitirá acometer la deseada ampliación. No obstante, la gerente matizó que este proyecto no tiene fecha. "El solar está en reserva, hasta que se cuente con fondos suficientes para realizar obras", explicaba López, quien agregó que, además de disponer de mayor superficie para sala de exposiciones, biblioteca y tienda, la compra del nuevo recinto permitirá mejorar un espacio muy deteriorado. "Es el único punto degradado que queda en todo el entorno ya restaurado, con lo que su intervención favorecerá la imagen de la zona", explicaba la gerente de la Fundación.

"La filosofía que ha imperado es ofrecer actos para el disfrute de los turolenses que pasan el verano en la capital –puntualizaba Rosa López–. No obstante, también asisten turistas". Las veladas nocturnas consiguen llenar en cada cita el aforo del jardín, previsto para 250 plazas. Este año se ha abierto un bar cafetería, lo que añade un nuevo aliciente para el público.