En enero de 2013 el ayuntamiento gobernado por el PP firmaba un contrato de servicios con Efial Consultoría, para la redacción de un estudio que debía determinar si era viable la construcción de un nuevo pabellón polideportivo junto a la Ciudad Deportiva. La misma empresa que lo construyera se haría cargo después de su gestión y explotación.

El encargo de aquel estudio, por un importe de casi 35.000 euros, se hizo por medio de un procedimiento negociado, sin publicidad, y en el que se acordó, como recogen las cláusulas, que el precio del estudio se incorporaría a la licitación del contrato de obra. Sería por tanto el adjudicatario de la misma, el que asumiera ese gasto. Entonces se dejaba claro que, en caso de que el procedimiento de licitación de la obra pública no llegará a producirse, porque no se aprobase el estudio o quedara desierto, el Ayuntamiento no tenía obligación de pagarlo, ni el proyecto básico que incluía. Sí quedaban en propiedad municipal.

Se asegura que hace falta un nuevo estudio de viabilidad que se adapte a la situación económica y deportiva actual, y afirma que el anterior ya redactado, "constituye un antecedente de singular importancia". Así se recoge en el expediente de convenio transaccional con Efial, donde también se afirma que con este acuerdo se soluciona "de forma satisfactoria para ambas partes", el problema planteado. Con esto terminará la relación contractual por el estudio de viabilidad de 2013.

El coste de 23.000 euros más IVA, "que se corresponde con los dos tercios del precio inicial", lo abonará la adjudicataria de la obra en el plazo de un mes desde la fecha del contrato. Si la construcción no se adjudica será el ayuntamiento el que pague la totalidad hasta el 31 de marzo de 2016. Desde la oposición creen, como indican desde Ciudadanos, que es "innecesario" este nuevo estudio. El portavoz del PSOE, Víctor Ruíz, sostiene además que no hay obligación de pagar "ni un céntimo de euro", por un estudio "que se ha hecho en menos de una semana", y con base en un acuerdo que no creen justificado.

El contrato transaccional, según la propuesta del mismo, trata de evitar "pleitos pendientes futuros", y resuelve "la incertidumbre de las partes sobre una relación jurídica", al asumir cada una "recíprocas prestaciones y sacrificios". Ruiz indica que no les consta que exista formalmente reclamación alguna de la empresa. Sin embargo, Arturo Yagüe, el concejal de Deportes, señaló que había habido alguna conversación con la empresa, y que ésta podría reclamar al Ayuntamiento porque ni siquiera se llegó a licitar la obra del nuevo pabellón. Explicó además que ahora se trataría de externalizar los cursos que se hacen en el polideportivo a reformar. Por ello el estudio es distinto, además de que lo exige la Ley de Contratos Públicos.