El Zaragoza podría no disputar en Anduva su primer partido de liga

El Mirandés teme que las obras que lleva a cabo en el estadio no estén acabadas dentro de 15 días. Pasado mañana martes ha de decidir dónde se juega. Vitoria y Logroño son las alternativas.

El estadio de Anduva presentaba este aspecto al principio de esta semana, tras 45 días de obras en su grada de general, que ha sido totalmente derruida  y está en trance de ser reconstruida.
El estadio de Anduva presentaba este aspecto al principio de esta semana, tras 45 días de obras en su grada de general, que ha sido totalmente derruida y está en trance de ser reconstruida.
raúl canales/diario de burgos

El partido Mirandés-Real Zaragoza, con el que se abre la liga 2015-16 dentro de dos semanas, podría no disputarse en el estadio de Anduva de Miranda de Ebro. Las obras que el club burgalés se ha visto obligado a acometer durante el verano para adaptar sus instalaciones a la normativa de la Liga de FútbolProfesional, aún inacabadas, pueden derivar en que el Real Zaragoza visite a los mirandeses en otra ciudad, es decir, en un campo neutral.


La directiva del Mirandés no tiene claro que en la fecha del partido, el domingo día 23 (18.30), la nueva grada de general, totalmente reconstruida tras demolerse la antigua, tenga todos los permisos en regla para ser utilizada en un espectáculo público. En las últimas horas, la empresa constructora que lleva a cabo la reforma se ha comprometido a rematar los trabajos básicos dentro de las próximas dos semanas. Pero en los despachos del club rojinegro han sido advertidos de que, aunque así fuera, los problemas de tiempo podrían llegar para el Mirandés a la hora de recibir la documentación oficial de entrega de la obra, la obtención del permiso municipal para utilizar el recinto o la licencia de la inspección de seguridad que dé el visto bueno para que el nuevo graderío pueda acoger a los aficionados que allí acudan.


En definitiva, se teme que, aunque todo lo relativo a obras materiales como gradas, tejados, escaleras, barandillas, butacas, baños o dotaciones de servicios diversos sí que pueda estar entregado a tiempo (como promete la constructora), el colapso llegue por la vía de la documentación que han de visar organismos e instituciones como colofón a cualquier obra de esta envergadura.


La fecha límite para designar el campo donde se jugará el partido es pasado mañana martes. Si el Mirandés no dice lo contrario y queda marcado Anduva como sede del primer partido liguero ante el Real Zaragoza, correría el riesgo de perder los tres puntos a favor de los aragoneses si, llegado el día 23, el estadio no pudiera abrirse.


Para evitar ese riesgo, los directivos mirandeses estudian seriamente llevarse el partido fuera de la ciudad burgalesa. Ya han contactado con el Alavés y con el Logroñés, tanteando la posibilidad de que los clubes de Vitoria y Logroño puedan cederles sus estadios, Mendizorroza y Las Gaunas, respectivamente. Mientras tanto, en los despachos del club norteño va a madurarse la decisión definitiva en las próximas 48 horas. Ayer trascendió que la opción preferida en la directiva del Mirandés es jugar en Vitoria, ciudad que está a solo 35 kilómetros de Miranda de Ebro. Pero el Alavés, que inicia la liga a domicilio en Huesca, no tenía clara una respuesta positiva en un principio. Por eso, el plan B sería Logroño, a 66 kilómetros de autopista de la localidad mirandesa.


El Mirandés, a instancias de la LFP, ha tenido que eliminar de raíz su vetusta e histórica Grada de General, la de enfrente de la principal, donde todas las localidades, más de 4.200, eran de pie sobre unos escalones de hormigón que databan de los años cuarenta del siglo pasado. Algo que, dentro de las minuciosas exigencias que se piden a todos los clubes profesionales en los últimos años desde todas las instancias, resultaba inexplicable para el resto de equipos que visitaban Anduva. Ahora, con el nuevo graderío, esa tribuna va a pasar a tener 3.500 modernos asientos, todos con su butaca individual como exige la normativa. De paso, se ha prohibido al Mirandés la ubicación de público de pie, delante de la tribuna de preferencia y a lo largo de toda la banda de banquillos, hecho que incomprensiblemente se produjo hasta la última campaña.


Por lo tanto, el Real Zaragoza conocerá pasado mañana martes dónde jugará su primer partido de liga dentro de 15 días. Tal vez, en vez de viajar a Miranda como se daba por descontado, deba hacerlo a Vitoria o Logroño.

Terrazas, espía en El Alcoraz

Por otra parte, el entrenador del Mirandés, Carlos Terrazas, se desplazó el pasado viernes hasta Huesca para ver in situ al Real Zaragoza, su primer adversario liguero. El técnico vasco tomó nota de las nuevas hechuras del equipo de Popovic desde la zona de prensa de El Alcoraz.
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