"Los consumidores tienen los derechos cubiertos al 100% en internet"

María Lobato. Zaragozana, 34 años, es la asesora legal de Yieldify, una empresa dedicada al comercio electrónico en la que ha decidido invertir Google.

Lobato, en el bar La Clandestina de su Zaragoza natal.
Lobato, en el bar La Clandestina de su Zaragoza natal.
aránzazu navarro

-¿Cómo consigue uno cerrar tratos con Google?

-Tras muchísimas negociaciones y reuniones...


-Pero ¿llamas por teléfono al señor Google y se lo pides?

-¡No! Ellos tienen un departamento específico de inversiones. Y en un momento determinado, se les presenta un proyecto, les explicas la compañía, nuestros planes y objetivos, y deciden invertir en él, igual que ha hecho, por ejemplo, Soft Bank.


-Supongo que, después de este logro, lo tendrá de buscador predeterminado...

-Sí, sí, ¡lo tenemos!


-Google solo ha invertido en tres empresas europeas. ¿Qué han visto en una empresa de apenas dos años?

-Pues tenemos competidores, pero quizá nuestro sistema software, completamente distinto a lo que hasta ahora se hacía, les haya decidido. En su caso, invirtieron también en Über, que ahora está prohibido en muchos sitios... Ellos buscan un producto diferente para un mercado global.


-Pero ¿qué es lo que hacen ustedes que llama tanto la atención?

-Incrementar las ventas ‘online’ de las compañías.


-Y ¿cómo lo logran? ¿Con hipnosis virtual?

-¡No! Se estudia el comportamiento del usuario dentro de la web y, si se ve que va a abandonar la página, se le ofrecen productos que haya mirado, ofertas, un descuento. Y potenciamos mucho la publicidad a través del correo electrónico, para ofrecer productos que interesan al comprador.


-Al comercio por internet, ¿no le ha afectado la crisis?

-Pues creo que el comercio electrónico es lo único que se está manteniendo y, es más, creciendo. Inglaterra es el segundo país de Europa con más compras ‘online’, solo detrás de Alemania. Pero España, a pesar de la crisis, está en los primeros puestos.


-Y la gente ¿se fía?

-Las estadísticas dicen que sí. Tú das tu tarjeta en una web, igual que en un comercio físico. Los jóvenes han crecido ya con internet y ese miedo inicial ya ha desaparecido.


-Y usted, ¿es buena compradora o se le dan mejor las ventas?

-¡Se me dan mejor las ventas que las compras! Pero todo lo que compro, excepto la ropa, es a través de internet.


-Los consumidores, ¿tenemos los derechos cubiertos por la red?

-Sí. Ese es mi trabajo: cumplir al 100% con la ley, protección de datos, ‘cookies’ y demás. Son leyes muy desarrolladas y dinámicas. Y aunque nuestro trabajo es seguir al usuario, cumplimos lo que la ley marca en cada país rigurosamente. Y en Alemania o España son normativas muy restrictivas.


-Usted es abogada, ¿contra qué hay que pleitear hoy?

-¡Contra muchas cosas! Yo me dediqué muchos años al Derecho Penal, y la delincuencia es algo que siempre va a existir. Hoy me dedico a la protección de datos y es más reconfortante: porque proteges tanto a un usuario como a una compañía.


-En su currículum dice entender y comprender el derecho internacional. Pero ¿es entendible?

-¡Sí lo es! Y a mí me gusta muchísimo. Al final, es un engranaje, hay muchísimos tratados de los que los países europeos forman parte, y luego cada país desarrolla las leyes a su manera. Eso te permite descubrir cosas nuevas y estrategias legales. Requiere tiempo, pero sí se puede entender.


-Por cierto, ¿cómo es la ‘City’ de Londres? ¿Como en las películas: todo el mundo corriendo y sin tiempo para nada?

-¡Lo es! Todo el mundo va estresado, nadie sonríe demasiado, cuando coges el transporte público puedes ver en sus cabezas que ya están pensando en lo que van a hacer durante la jornada, no se come en casa nunca, no existe la siesta...


-Y entonces, ¿qué tiene la ‘City’ que no tenga Plaza o Malpica?

-Mucho trabajo... y se puede llegar a ganar dinero. Y hay una cosa que ocurre en general en Inglaterra, y es que si tú eres una persona trabajadora tienes oportunidades, no importa de dónde vengas. Y existen las promociones laborales, los incrementos salariales, que te respeten las vacaciones de verano... cosa que, desafortunadamente, en España no siempre existe.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión