Carlos Pérez lleva casi 30 años en el sector lácteo y jamás había vendido la leche tan barata. Este ganadero es propietario de una explotación de 120 vacas en el municipio zaragozano de Quinto de Ebro. Cada día recoge unos 2.000 litros de leche que ahora vende a una cooperativa aragonesa. La distribuidora habitual que recogía su leche le pagaba "tarde y mal".  

La crisis que vive el sector lácteo (especialmente en el norte de la península) ya se siente en el territorio aragonés. “El precio de la leche ha empezado a desplomarse en Aragón y se están pagando precios por debajo de los costes de producción”, lamenta el secretario general de UPA- Aragón, José Manuel Roche.

La historia de Carlos confirma la tempestad que sufre la industria. “Tenía un contrato con una fábrica de leche aragonesa y ya el pasado invierno en vez de subir los precios -como es habitual en esa estación del año en la industria láctea, según Pérez- sufrieron una disminución de seis céntimos. De cobrar 0,36 euros el litro, pagaron 0,30”, explica el ganadero.

La forma de pago estipulada en el contrato era de 30 días a mes vencido, pero la distribuidora retrasó los pagos a 120 días. “Acepté porque tenía que vender la leche y porque eran talones con aval pero en el mes de abril volvieron a bajar el precio tres céntimos y empecé a tener problemas para cobrar”, cuenta Pérez. Así, el precio que pagaban a este ganadero por el litro de leche era de 0,27 euros. “Por debajo de 0,36 euros el litro de leche todo son pérdidas”, sentencia. El problema no solo eran los ruinosos precios al que pagaban la leche, sino los retrasos en los pagos. “Todavía hoy no me han abonado el mes de abril”, dice Pérez quien asegura que está valorando tomar acciones legales: “No puedo aguantar más”, apunta.

La situación de “angustia” que vive la industria se debe a varios factores. La causa principal, dice el secretario general de UPA- Aragón, José Manuel Roche, es el incremento de producción que sumado al veto ruso ha hecho que Europa tenga que absorber toda la oferta de leche. Ante esta situación, “los productores no tienen poder y son las industrias las que amenazan con no recogerles la leche o hacerlo a precios ruinosos de entre 25 y 30 céntimos el litro", apunta Roche quien denuncia que esos precios son ridículos: “Solo en piensos para dar de comer a las vacas gastas más”, sentencia. Además, según el ganadero Carlos Pérez, el consumo de productos lácteos ha disminuido en los últimos años.

Así, continúa Roche, la supervivencia de muchas explotaciones aragonesas está en peligro si desde el Ministerio de Agricultura no se toman medidas. “Hace una década había una 200 explotaciones vacunas en la comunidad. Hoy no alcanzan las 80”, dice el secretario general de UPA- Aragón. 

Por otra parte, la política de las grandes superficies merma el sector. “Utilizan la leche como producto reclamo y venden el tetrabrik de marca blanca a unos 40 céntimos”, sentencia Roche: “Es imposible que el ganadero pueda soportar los costes de una explotación con esos precios”.

Sobreproducción de leche

Ante esta grave crisis que vive el sector lácteo, que desde UPA califican de “histórica”, Roche reivindica un mayor control por parte de las instituciones. “Es necesaria una intervención urgente del Ministerio de Agricultura para sacar leche del mercado. Hay una sobreproducción”, aclara Roche. Desde UPA-Aragón apuesta por destinar esa leche sobrante a la beneficiencia. "Repartirla en comedores o centros sociales", apunta. 

Y, también, es necesario restablecer los precios, según Roche. “Los productores y las empresas distribuidoras tiene que cerrar contratos con la industria con un precio fijo”, concluye.