De las tres líneas existentes, las dos más solicitadas fueron la A, que recorre la ciudad en línea recta desde el barrio de La Fuenfresca hasta la Carretera de Alcañiz por la Avenida de Sagunto y la Ronda de Ambeles, y la B, que va de la Fuenfresca al Centro Histórico pasando por el Ensanche y el Paseo del Óvalo. Precisamente, la empresa ha reforzado el trayecto A y el usuario dispone de un autobús cada 15 minutos frente a los 20 o 25 minutos que debía aguardar antes. En los otros dos recorridos, el B y el P –al polígono industrial y barrios–, la espera puede prolongarse hasta media hora.

Mayor demanda registró, no obstante, la ventanilla que la empresa tiene habilitada en la estación general de autobuses para expender bonos de utilización e informar al público sobre el bus urbano. Según explicó el responsable del servicio, Juan José Peiró, La Veloz tuvo que reforzar con dos trabajadores este servicio –habitualmente hay solo un empleado– para poder atender a todos los ciudadanos que preguntaban por el nuevo servicio de bus urbano.

"Ha sido desbordante; han venido decenas de personas a preguntar, lo que nos lleva a pensar que hay un gran interés por el nuevo autobús urbano", manifestó Peiró. El responsable de La Veloz expresó su confianza en que el aumento de viajeros registrado ayer se mantenga en el tiempo, aún cuando a partir de la próxima semana el billete cueste 1 euro frente a los 90 céntimos de antes. Según explicó, en Teruel no existen grandes distancias, "pero un servicio de autobús cómodo y eficiente tiene futuro".

Entre los usuarios, si bien la mayoría alabó la comodidad y rapidez de frecuencias de los nuevos autobuses, hubo quien, como Lina Calvo, lamentó la disminución de servicios entre el Centro Histórico y el barrio del Carmen. "Comprendo que cogíamos el bus poca gente, pero a mí me iba muy bien tener tantas posibilidades y ahora me dicen que solo hay un viaje al día", dijo. Otra mujer, Julia Valero, consideró que los autobuses "son demasiado grandes y así siempre va a parecer que van medio vacíos".

Otros usuarios se quejaron de que no habían sido retirados los postes de algunas paradas suprimidas, lo que creó "confusión". En el lado contrario, una mujer, Miriam García, comentó que a partir de ahora cogería más el autobús. "Me he dado cuenta de que es muy cómodo", dijo.