"El colmo de los del tiempo es quedarnos sin tiempo para explicarlo"

Que haga calor en verano no es noticia. Pero tantos días seguidos y con tanta intensidad, sí.

¿Es el año de más calor del mundo mundial? ¿O lo sentimos todos los años así?

No, no, este año comenzó muy pronto y no da tregua. El balance se hace al final de la estación. Pero en lo que llevamos de verano ya tenemos datos de récord. Habrá que buscar razones, porque no ha sido solo en España; en media Europa se han dado cifras que no se alcanzaban desde el siglo XIX.

Y no nos creíamos lo del cambio climático...

Aún quedan escépticos, pero pocos. No hay duda del cambio climático ya. La temperatura está subiendo y hay que estudiar si por causa natural o por el hombre. Yo creo que es una mezcla, pero el cambio está siendo rápido y en poco tiempo y por eso se cree que es por la actividad humana.

El resto del verano, ¿nos dará un respiro o seguiremos sin poder respirar?

Según las previsiones a medio plazo, de respiro, nada. Quizá no tanto, pero las predicciones estacionales ya decían que sería un verano más cálido de lo normal. Las que ya se han sacado para los tres meses siguientes lo confirman.

¿Qué le deja sin respiración a Eduardo Lolumo?

Una buena cena con buena compañía y en un sitio de playa. O un buen viaje. Yo viajo a menudo y me empapo mucho del clima. Y cuanto más lejos mejor. Aunque también recomiendo viajar por Aragón, hay mucho que ver. Afortunadamente, yo viajo por toda la Comunidad muy habitualmente.

Sea sincero, ¿le dejamos vivir cuando lo vemos por la calle?

¡Soy sincero! Me preguntan continuamente y en lugares de todo tipo: cuando pago en una caja –y he llegado a poner mal el pin o coger mal el cambio– o en los vestuarios del gimnasio, donde me preguntaron una vez si podía haber un tornado en Aragón. Que, por cierto, es difícil, pero no imposible.

O sea, que además de para Aragón TV, trabaja para la BBC. Porque le consultarán para bodas, bautizos y comuniones...

¡Ni se imagina! E intento dar respuestas precisas, pero algunas preguntas son complicadas. ¡Tendría que ir con una pizarra para poder explicar algunos fenómenos!

Equivocarse en una predicción, ¿es más peligroso que dar mal los números de la primitiva?

Creo que sí. Además ¡te lo pueden recordar toda la vida! Si haces una buena predicción, ganas adeptos, pero cuando no, siempre arruinas algo a alguien: un partido de tenis o una boda. Pero, aunque sea arrogante decirlo, pocas veces pasa.

Eso no es arrogancia, es ciencia, ¿no?

Pero es una ciencia que no es exacta y tú haces una previsión, que es un futurible.

¿Alguna vez ha sufrido una borrasca... en el plató?

¡Y temporales! Como cuando el mando para pasar los mapas decide no funcionar. ¡Y te quedas vendido! Y alguna borrasquilla hemos tenido con los editores, porque pedimos algo más de tiempo. Es el colmo de los del tiempo: quedarnos sin tiempo para explicarlo.

En un día puede hacer sol, llover y tener niebla y cierzo. El tiempo en Aragón, ¿es el soñado por un meteorólogo?

Entiendo que a la gente no le guste, pero a nosotros sí. Lo sano es el frío en invierno y el calor en verano. En muchos puntos de Aragón, sobre todo en el valle del Ebro, el tiempo es muy extremo. ¡Es como viajar gratis! De la niebla londinense o los vientos islandeses al siroco de Marrakech.

Ser el hombre del tiempo, ¿le deja tiempo para otras cosas?

Sí, pero ¡otra cosa es tener dinero para hacerlas!

¿De qué es tiempo hoy? ¿De qué va siendo tiempo ya?

De renovarse. Estamos un poco anquilosados y amuermados. Lo noto en todo, como en mi otra pasión: la música. Hoy no hay un grupo que dé el bandazo que dieron los Beatles, los Rolling, Bowie. Y yo quiero que llegue un grupo de música que me alele. Hoy se nota cierto aire de cambio, pero nos faltan los medios.