La nueva bajada del IRPF solo afectará a alrededor del 60% de los aragoneses

La nueva rebaja del IRPF anunciada por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, solo afectará a alrededor del 60% de los aragoneses. Estas nuevas reducciones, previstas en un primer momento para el año 2016 y adelantadas previsiblemente por la proximidad de las elecciones generales, supondrán un descenso menor que el vivido a principios de año.

El pasado jueves, Rajoy anunció que “todos los trabajadores notarán en su nómina una rebaja de las retenciones igual que la que experimentaron en enero de este año”. No obstante, esta no es una realidad generalizada. De hecho, según los últimos datos publicados por la Agencia Tributaria, más de 270.000 aragoneses no verán ningún cambio en sus nóminas, mientras que sí que notaron la modificación realizada en enero.

Esto se debe a que la reducción implantada a principios de año implicaba que aquellos trabajadores que tuvieran unos ingresos menores a los 12.000 euros anuales, no pagarían IRPF. Una decisión que parece que se mantiene con esta segunda fase de la reforma.

De este modo, poco más del 60% de los aragoneses notarán verdaderos cambios en su próxima nómina. “Si se mantiene lo previsto en la ley de noviembre de 2014, se va a reducir entre uno y dos puntos todos los tramos”, recuerda Fernando Rodrigo, profesor titular del Departamento de Estructura e Historia Económica y Economía Pública. En concreto, los tramos más bajos -hasta los 35.200 euros anuales- tendrán una rebaja de 1 punto porcentual, mientras que a partir de esa cifra el descuento que se añade es de 2 puntos.

“Realmente con esta modificación los grandes beneficiarios serán aquellos que tengan sueldos más altos porque son los que más van a ver descender sus aportaciones a Hacienda”, destaca Rodrigo. Por ejemplo, según la Agencia Tributaria, en Aragón hay 55 personas que declaran unas rentas superiores a los 601.000 euros al año. En este caso, si se trata de una persona que vive sola y no tiene ningún tipo de obligación, verá aumentar su nómina en más de 11.500 euros anuales como mínimo.

Por el contrario, el sueldo medio de un aragonés es más modesto y ronda los 20.000 euros. En este caso, si tampoco tuviera ninguna carga familiar, el ahorro sería de 124,5 euros al año. “Esta medida se ha tomado por dos razones diferentes, por un lado, estimular el consumo, y por otro, dar un respiro a los ciudadanos de cara a las elecciones generales”, sostiene Rodrigo.

Mejoras para los autónomos

Otro de los cambios que llegan con la nueva medida, que entrará en vigor el 1 de julio, es que todos los autónomos tendrán una retención del 15%, mientras que hasta ahora eso solo afectaba a aquellos que tenían unos rendimientos inferiores a 15.000 euros anuales. De este modo, los más de 106.000 autónomos que trabajan en la comunidad aragonesa verán cómo sus ingresos ascienden este mismo mes.

Según la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), esta bajada supondrá un ahorro de unos 60 euros al mes para cada autónomo, lo que generará unos ingresos de 700 euros al año.

Puesta en marcha

La duda ahora se encuentra en cómo se llevará a cabo esta reforma fiscal, que provoca que la mitad de un año se tengan unos impuestos y la otra mitad, otros. “Lo más lógico es pensar que se equiparará todo el año a estos nuevos y, por lo tanto, la reducción será mayor estos seis meses”, señala Rodrigo. Sin embargo, hasta el próximo 10 de julio no se conocerán las posibles modificaciones.

En su opinión, en vez de hacer el descuento como si fuera un mes normal, “lo más lógico es que se hiciera de dos y así se equiparara como si se hubiera cobrado todo el año”. En este caso, un trabajador que cobre 30.000 euros anuales y tenga dos hijos, en vez de tener un descenso en la nómina de 16,6 euros al mes, sería de 33,3. “De este modo, el sueldo real no se podría ver hasta la llegada del próximo año”, puntualiza.